—Tienes unos ojos hermosos, lástima que sean desprovistos de intuición. —Joa se encarama en el cuello de su trillizo y se pierden viéndose el uno al otro. —Nena, hemos conseguido la mayoría del material de la lista —dice Jujitsu orgulloso de la sonrisa en los labios gruesos de su mujer. —¡Mi cabeza explota de tan solo imaginar el plan en marcha! —exclama Joa llena de adrenalina y su pareja la besa. Mi hombre se acerca hacia mí y sujeta mi mano. Miro la unión y como se entrelazan nuestros dedos. Decido jugar con Joa, la jefa y hermana de mi hombre oscuro. —¡Enciendan el puto micrófono! —Joa y Hernán se despegan al escuchar mi aullido—. Joa, no tengo intuición, pero sí a un maníaco que se complementa con mi demonio y cada vez que tiene oportunidad me pide que fluya con él. —Vilen me leva