*** EMILIA ***
—¿Todo bien? —pregunta mi amiga preocupada—. Te pusiste pálida.
—Solo recordé que tengo algo pendiente —explico, al tiempo que me alejo de la pantalla—. Discúlpeme, luego hablamos —me excuso antes de tomar mi bolso y salir a paso rápido.
Tal vez sean solo ideas mías, pero necesito aclarar todo esto, o no tendré paz.
*** LAURA ***
—¿Y Ana? —pregunto, una vez mamá me ayuda a dejar a Silvana en la cuna, después de sacarle los gases.
—En casa. Tu papá debía ir a alistarse para trabajar, así que aprovechó para que la llevara. Estaba loca por enviarle las fotos de Silvana a tu tía... Dijo que también se dará un baño y comerá algo antes de regresar —menciona con una sonrisa. Su mirada se fija en Fernando, que está en silencio, sentado en el mullido sofá—. Hablando de comer, m
