El dolor de amarte

Capitulo 29

—Te dije que doctorcito de pacotilla si a él le pasaba te iba a pasar lo mismo ¿Qué parte no entendiste?

—Tranquilízate Caesar deja hablar al doctor, poniéndolo nervioso no ganamos nada. Mire al doctor con calma, la que no tenía y mire el cuerpo de Darren en el suelo, quería correr hacia él, pero mis pies no obedecían, respire hondo y mire fijamente al doctor

—Lo sí…siento el paciente…. ya no tiene pulso, llegamos tarde

—Ya no pude contenerme. Ningún, tarde doctor, vas a revivir a este hombre o te entierro con él. Me arrodille frente a Darren, estaba pálido, demacrado, sus ojos estaban cerrado, eso me dio mucho miedo. No puedes irte hijo de puta, nos hiciste armar una guerra por ti, no puedes abandonarnos, eres Darren Ferrara nadie puede contigo. Di golpes en su pecho sin medir mi fuerza, la piel se tornó roja enseguida, no pare de hacerlo hasta que Caesar me detuvo

—Mira

—Fue lo único que dijo Caesar, con mis ojos vidriosos pude ver su pecho subir y bajar muy leve, lento diría, el doctor se acercó a Darren coloco una inyección y luego nos miró a mí y a Caesar

—Debemos sacarlo de aquí enseguida, su pulso es muy débil, está sangrando demasiado

—Tome a Darren en mi espalda sin esperar nada, corrí por esas escaleras, subimos al helicóptero, lo acomode y no recordé ni cómo llegamos a Barcelona en un pestañeo, Mathias tuvo que bajarme del avión

—¿Te encuentras bien Caesar?

—No lo estaré hasta que el carbón de Darren este bien. Mire fijamente a la sala de operaciones, el doctorcito dijo que el necesitaba intervenciones y no sé cuántas cosas más, a mí las manos no dejaban de temblarme de solo pensar que algo trágico podía pasar

—Si no me hubieras detenido en ese momento…. no quiero pensar en eso, ya envié un avión para recoger a tu hermana y Dalia, los “demás” ya están en la bodega esperándonos

—No me voy a mover de este puto hospital hasta que ese cabrón abra los ojos, no puedo Mathias de verdad esto me sobrepasa, ni con mis hermanos me pasa, él tiene que despertarse aún debe presentarme a la que va a ser la mujer de mi vida

—“Familiares del paciente Ferrara”

—Los dos saltamos como resorte de nuestros asientos, con la mirada puesta en nosotros, imagino que no por lo guapos, más bien era por como andábamos vestidos y sucios para rematar, Caesar se adelantó a preguntar, estaba muy ansioso

—¿Cómo está mi amigo?

—No podemos darle esa información, solo si el familiar directo del paciente

—¡Me va a dar la información que quiero o en este momento destruyo todo el hospital!

— Cálmate Caesar, no conseguiremos nada así. Respire hondo. Señorita somos la única familia que tiene, nosotros lo trajimos y nosotros nos haremos responsables de él, por favor podría darnos información

—Señorita enfermera, yo puedo tratar con ellos, son…. mis amigos

—Doctorcito ¿Cómo esta Darren?

—Sabes que con tu acento suena despectivo llamarme “doctorcito”

—Solo dime como se encuentra, y te dejare vivir en paz

—No empezamos de la mejor forma, pero algo me dice que no son malas personas si arriesgaron tanto para salvar a un amigo

—Doctor, no le haga caso a Caesar, podría decirnos la condición de Darren

—Claro que si, su amigo está en muy malas condiciones, la desnutrición y deshidratación son una de esas, la peor es la dependencia de la combinación de melanotan y testosterona al que estuvo por mucho tiempo expuesto, está teniendo espasmos de dolor por la abstinencia y eso le causa problemas con los riñones y otros órganos

—¿Estás diciendo que Darren es dependiente a las drogas?

—Si señor Mathias, le han causado mucho daño, su cuerpo tiene muchas laceraciones, su piel esta magullada, tenía los huesos de la muñeca y tobillo rotos por las cadenas, esta fue una tortura muy fuerte, su pene esta inflamado por todo el abuso que sufrió, lo único rescatable es que no tiene ninguna enfermedad de transmisión s****l

—¡Esos malditos! ¿Qué tanto se ensañaron con él?

—De la peor manera Caesar, pero sé que Darren se recuperará y los hará pagar por todo lo que le han hecho

—Necesitamos encontrar a esa mujer, ella es la clave de todo

—No te entiendo Mathias ¿Cuál mujer?

—“oscuridad” Ya lo olvidaste Caesar

—Perdón, si la olvide por un minuto, moveré a todos los hombres apenas Darren este mejor

—Disculpen la interrupción, pero……. ¿Cuándo podrán regresarme a mi país? Ya llevo muchos días fuera, mi familia va a empezar a buscarme, no quiero causarle más problemas

—Disculpe nos olvidamos de usted por un momento, será imposible que regrese a su país por ahora, es imposible cambiar de doctor, espero entienda la situación en que se encuentra

—¡Perdón! ¡Situación en que me encuentro! ¡“¡El maniático que tiene por amigo me secuestro, me llevo a la fuerza porque necesitaba un médico”! Yo no pedí estar aquí, tengo que regresar

—Entiendes por las buenas o por las malas medicucho, no te iras, enviaras una carta a tu familia indicándole que estas bien, que te fuiste a otro país, enviaras la carta de renuncia al hospital de cuarta que trabajas y asunto solucionado, ¡Entendiste! ¡O quieres que te lo explique! Mi paciencia estaba al límite por hoy, no pude contenerme teniendo en frente a este médico, mi arma apuntaba su cabeza para hacerlo entrar en razón

—Baja el arma Caesar, no necesitamos más problemas

—Déjame volarle la tapa de los sesos para poder calmarme, al parecer este tipo no entiende la situación tan delicada que estamos pasando, déjame hacerlo Mathias

—No es la solución, tendrás con quien desquitar tu furia de sobra empezando por Viktor y terminando por la mujer esa que traiciono a Darren

—¿La trajiste? ¿Por qué lo hiciste? Mathias ¡estás loco! Darren no querrá verla

—Sé que Darren querrá verla Caesar y no solo eso, el mismo hará un infierno su vida