Lance
- madre te prometo que cuando regreses del viaje te la presento, pero ahora no insistas-
- está bien hijo, confió en ti-
Después de unos minutos se despide mi madre y voy al dormitorio abro la puerta y veo a mi mujer con una camisa mía sentada con sus rodillas abrazadas a su pecho en la cama, me acerco.
- amor, todo está bien ya se fue mi madre- le digo sentándome junto a ella y acariciando su rostro.
- Lance por un momento sentí que iba a entrar en la habitación-
- tranquila, ya paso- le digo con malestar.
- ¿estás molesto? ¡verdad! -
Me levanto tratando de aguantar la rabia que tengo por la situación, respiro profundo y le digo
- Karina ¿hasta cuándo hacemos esto? no aguanto más-
- Lance ten paciencia, unos días más por favor- me dice a modo de súplica.
- Karina no somo
