POV Judas —Vine tan rápido como pude, espero que sea una broma porque no creo que hayas podido permitir eso. Al no responder a la pregunta de Duván, él me sujetó de los hombros. Podía sentir su furia y desesperación a través de su agarre. —Lo hiciste, dejaste que se fuera sola en la noche. ¿Qué diablos tienes en la cabeza, hombre? —gritó, su voz cargada de incredulidad y rabia. —¿Qué querías que hiciera? —le respondí con la misma intensidad, sintiendo una mezcla de frustración y defensiva—. ¿Que la secuestrara, que la encerrara en una habitación hasta que se le pasara el enojo? —Pues sí, ¿no te das cuenta de las cosas? —Duván se veía realmente alterado, pero al final me soltó los hombros, dejándome volver a sentarme sobre mi escritorio—. Mira, sé que hay muchas personas que nos deben