Capítulo 56. ¿Te preocupa que Maximo se quede en la isla? En la mansión Ross la algarabía por la llegada de las chicas era enorme, los empleados corrían de un lado a otro trayendo y llevando cosas, una semana de descanso fue suficiente para ellos también, ahora volvían a la rutina de atender cada antojo y cada pedido de las chicas. El equipaje también había llegado, así que una parte de las señoritas de servicio estaba encargándose de enviar toda la ropa para que sea lavada y las cosas personales a la habitación de cada una de las chicas. Inclusive las pocas cosas que llegaron de Paulo también fueron directo a la lavandería de la mansión, pero no había problema por nada, con el increíble sistema de lavado y secado que tenían en la mansión, ese mismo día todo volvería a las habitaciones to