Al final resultó que, Harry dio en el clavo con su pedido. Superamos nuestros límites, personalmente pensé que podría salir rodando de Novikov en lugar de caminar, pero no quedaba ni una sola pieza de comida para comer en nuestra mesa. Olivia y yo convencimos a Harry para que se quedara y tomara un cóctel con nosotros, y aunque expresó su desaprobación por beber durante el día, tomamos tres cada uno antes de que llegara la llamada. —Lo siento, señoras, pero hay algo que debo hacer en el trabajo. —El universo no puede sobrevivir sin ti por mucho tiempo —le dije, y él sonrió. Todavía estaba esperando que volviera el frente frío, pero no se veía por ninguna parte. Su hermana estando en la mesa había mantenido a raya las insinuaciones sexuales y esperaba estar agradecida, pero me encontré