JASON
—Oh, ¿es eso un reto, señor Knight?— Preguntó, su tono seductor.
—No lo sé, Srta. Vills, ¿lo es?— Respondí, acercándome a ella.
No me cansaba de mirarla, era un misterio tan hermoso.
La miré, tratando de averiguar qué iba a hacer con esta mujer, no había manera en el infierno que iba a perder con ella.
Lentamente, incliné mi cuerpo hacia el suyo y...
—¡Tío Jason! ¡Tío Jason!
Keira.
Amaba a mi sobrina pero, ahora no era el momento; apreté los ojos solo para abrirlos y ver a una sonriente Silvia de pie, orgullosa.
—Yo gano.— Dijo en voz baja antes de volverse hacia la diablilla de mi sobrina. —¿Y a quién tenemos aquí?
—¡Keira!— Afirmó orgullosa mientras Silvia se acercaba para levantarla.
—¡Qué adorable eres!— exclamó, tocándose la mejilla mientras yo entrecerraba los ojos,
