Esto es tan inusual por parte de Nico, quien usualmente solo guarda silencio debido a los actos de Lion, que este le abraza sintiendo le debe reconfortar.
Nico- Los extrañé mucho.. Tanto.. Tanto..
Nuevas lágrimas caen por las mejillas de Nico, quien deja una caricia en la cabeza del niño, además de un beso en la mejilla de Lion. Nico se pone de pie, acuclillándose ante Lion y el pequeño, quienes permanecen en la banca.
Nico- Yo, hoy vine a pedirles un último favor.
Esto hace a quienes tiene enfrente, arrugar su entrecejo, más para este punto no evocan el menor temor en Nico. Este les sonríe con lágrimas en sus ojos, por lo que ambos permanecen en su lugar, observando la dificultad con la que Nico intenta formar cada palabra.
Nico- Lo sé todo.
Esto los confunde, por lo que Nico ríe de forma gangosa, limpiando sus lágrimas.
Nico- Me refiero a.. Su historia y la del hospital. Lion, no sé si quieres hablar de ello, pero por el estado en que está el hospital. Es muy probable que cierren, nadie cuidará del jardín que te gusta y yo..
Nuevas lágrimas hacen desmoronarse a Nico, quien es prontamente confortado por Lion y el niño, más Nico se aleja en busca de expresarse.
Nico- ¡No quiero que estén solos!
Los hipidos, las lágrimas que no cesan, Nico se encuentra inconsolable mientras cae al piso. Lion rápidamente le acompaña, abrazándole y hablándole al oído, por lo que los suaves lamentos resuenan. Más de alguna manera, Nico parece entenderlo para asombro de quienes les espían al otro lado del jardín.
-No llores por ello.
Nico- ¡Voy a llorar! ¡Lo haré cada día si sé que ustedes están aquí! ¡¿Pequeño mocoso, no te he dado suficiente cariño, para que no ansies el de nadie más?!
El pequeño baja su carita ante el regaño, ocultándose tras Lion, quien intenta limpiar las lágrimas incesantes de Nico.
Nico- ¡Y tú, Lion!
Al escuchar el inicio de su propio regaño, Lion se sorprende.
Nico- ¡Yo he estado más que al pendiente, te amo, y por eso no quiero que sigas aquí!
-Nico..
Nico- ¡No te atrevas a quedarte aquí, o buscaré la forma de quedarme a tu lado en el hospital, quiero que vayas más allá! .. Quiero que dejes todas tus penas.. Y.. Si hay segundas oportunidades, en caso de que la reencarnación sea real, yo quiero que me encuentres.
El silencio se forma en el lugar, la brisa mueve las hojas del jardín, y Nico casi podría jurar que Lion está llorando pese a no ver las lágrimas salir de sus ojos.
Nico- Quiero vivir contigo, llevarte de paseo, presentarte orgullosamente a mi familia al saber que no te importará su opinión. Estuve esperando por ti mucho tiempo, quizá suene tonto, pero era mi destino conocerte. Y no quiero ser yo quien te ate.
Lion se aferra en un abrazo a Nico, llena de besos su rostro, quien no deja de llorar un solo segundo.
Nico- Lion, si tú me lo pidieras, me quitaría la vida aquí y ahora. Mi familia realmente no me importa, tú eres más importante, pero.. ¿Eso te gustaría?
-¡no!
Ante el grito de Lion, los espectros a los alrededores se alejan, y los acompañantes de Nico sienten su espíritu querer huir de sus cuerpos.
Nico- Entonces.. La respuesta es clara. ¿Lion, me amas?
-Mucho..
Nico- Entonces.. ¿Cumplirás mi deseo egoísta?
-...
Nico- No es un adiós, Lion, es un hasta pronto sin importar cómo lo veas.. Yo.. Sé que todo empeorará cuando te vayas, este lugar cerrará, yo te voy a extrañar por quienes incluso no te conocieron.
Una suave risita sale de los labios de Nico, cuyo llanto se calma.
Nico- No me hagas esperar demasiado Lion, llévate al pequeño, y vengan a vivir conmigo. ¿Sí?
-Yo tampoco quiero que estés solo..
La sonrisa de Nico no se hace esperar, se abalanza hacia Lion besándole una y otra vez, intentando transmitirle todo lo que no le pudo decir en su momento. Sí, sabía que Lion no era un humano, probablemente desde el inicio. Solamente que no quiso aceptar la muerte de este hasta que sus compañeros le dieron la información, un viejo artículo de periódico sobre el joven a quienes sus padres no recogieron de la morgue, a quien nunca le pusieron atención pese a su esfuerzo por ello.
La inesperada enfermedad del corazón de Lion no fue motivo suficiente para dedicarle algo de su tiempo, por lo que Lion al estar internado en el hospital desarrolló el proyecto del jardín en el hospital, un lugar que calmó los avistamientos paranormales en la institución. Sus tiempos no coincidieron ni un poco, de estar vivo Lion sería un anciano, más eso no significa que el destino no les quisiera juntos. Lion lo sabía, que Nico ignoraba todo lo extraño a su alrededor, y al oír a su hermano quedó más que claro.
Nico también ha estado siempre solo.
Nico- Por eso no me dejes esperar.. Ve hacia adelante, no sé cómo, pero deja todo atrás y ve. Ya sea que vuelvas o me esperes, no puede ser así, no puede ser aquí.
-No te quiero olvidar..
Nico- Yo te recordaré, te haré recordarme, te perseguiré.
Con una sonrisa, Nico deja un beso más en los labios de Lion, quien le mira con tristeza.
Nico- Debes irte, si me mientes lo sabré, yo te buscaré y estaré triste.
Lion se pone de pie, ayudando a Nico a hacer lo mismo, asintiendo con su cabeza. Nico se vuelve a abalanzar a este, dándole un fuerte abrazo, además de un nuevo beso.
Nico- Por favor date prisa, no te quiero dejar ir, Lion.
Las lágrimas de Nico parecen nunca dejar de fluir, por lo que Lion intenta limpiarlas una última vez, dejando suaves caricias en el rostro de Nico y un suave beso en cada uno de sus ojos.
-Te amo, Nico.. Te buscaré donde sea.
Dejando un último beso en los labios de Nico, ambos pasan un momento sin querer dejar ir al otro, una vez llega el momento Lion corta el beso y toma al niño en brazos rápidamente. Se aleja tan rápido de Nico, que este tropieza, cayendo al piso para ver cómo Lion desaparece dejando los obsequios de Nico. Quien se acerca a las pertenecías casi gateando, encontrando incluso los dulces del pequeño niño.
¿Había sido todo? Nico no puede asegurarlo, más tiene fe de que así sea, ya que no desea que Lion sufra más. Sin la presencia de Lion, los acompañantes de Nico corren llevándose a este consigo, viendo con miedo cómo se descontrola el lugar.
Para ese punto, Nico no estaba a salvo, su protector se había ido. Y el del hospital, llegó a ser claro rápidamente, ya que en un par de semanas cerraron el hospital debido a cómo escaló la situación. Hubieron tantas muertes incluso, que hicieron una investigación tanto a los doctores cómo al hospital, siendo esta última una pésima idea.
Por supuesto, el lugar se convirtió en un punto embrujado, atrayendo incluso turistas. Nico buscó las tumbas del pequeño y de Lion, llevándoles flores en cada ocasión que puede, siempre de día. Desde que Lion besó sus ojos al despedirse, Nico ve cosas que otros no, razón por la que va a los cementerios solamente de día cuando no está tan activo.
Ova.
Con el pasar de los años Nico se independizó, se alejó completamente de su familia, tuvo un par de parejas más no se sentía satisfecho. Adoptó un par de mascotas, de las cuales una de ellas tiene la costumbre de balancearse en sus piernas, nombrándolo ‘mocoso’. Nico cumplió su promesa, comenzó a trabajar en un hospital para tener acceso a cierta información, así conoció a muchas personas.
Más el tiempo pasó y no les encontró, razón por la que adoptó dos mascotas, en busca de una forma de retribuir a un buen karma. No fue hasta que un día, le pidieron dar una conferencia en una universidad extranjera, que escuchó algo extraño de los jóvenes alumnos.
-Lo conozco desde que tenía seis años y desde entonces su mamá también le tenía miedo.
-Hace que todos lo llamen ‘Lion’.
Es entonces cuando un joven de ojos verdes entra al salón, con una expresión aburrida, hace pocas preguntas durante la conferencia sin hablar con nadie en particular. Más al finalizar, se acerca a Nico abriéndose paso fácilmente entre los estudiantes, con un misterioso brillo en sus ojos.
-Lamento la demora, Nico.