JOSHUA
Llegué a mi reunión con Elio Guinot a la hora acordada a su oficina. Me había costado un poco de trabajo conseguir la reunión pero gracias al amigo del papa de Adauco fue que pude conseguir esta reunión.
— Buenas tardes tengo una cita con el señor Elio Guinot —. Saludé a la recepcionista que estaba en la entrada del edificio.
— Buenas tardes, usted debe ser el señor Joshua Chevalier —. La mujer tomó el teléfono marcando a un numero.
— Así es —. Le confirmé.
Cruzó unas cuantas palabras anunciando mi llegada.
— Por aquí señor Chevalier. El señor Guinot se encuentra esperándolo en su oficina en el piso veinte. Mariana, su asistente, lo va a esperara a la salida del elevador —. Llamó al elevador por mí. Las puertas de metal se abrieron y le di las gracias —. Bienvenido señor
