JOSHUA Tenía a mi hijo en brazos y nadie me iba a separar de él. Nunca pensé que en mi vida dijera esto, pero tener el cul**o destrozado había sido una bendición por que gracias a eso tenía a mi bebé en brazos y había encontrado a Estefanía. No sabía aún si ella tenía alguna relación con alguien más, esperaba que no por que de ser así no podría soportarlo. Si de alguna manera me extrañaba o sentía algo por mí aunque fuera mínimo, creería en los milagros y en que el destino quiso que me jodie**ra el cu**lo para estar con ella. Yo la había extrañado horrores durante esos cuatro años y había podido hacerme a la idea de que ya no era más mi esposa. Verla frente a mí y no poder besarla, abrazarla y hacerle el amor como se supone que debía hacerlo para toda la vida se estaba, se estaba con