La obsesión del mafioso

Prólogo. Era sábado, sin abrir los ojos podía sentir el sol en mi piel, me encontraba más que encantada del rumbo que tomaban estás vacaciones, estaba feliz de estar aquí, todo está transcurriendo tal y como debería de ser, abrí los ojos y me encontré en mi habitación, todo estaba en orden eso era lo único bueno de tener dinero, podías siempre tener a alguien detrás de ti arreglando tu desastre, amaba esto, amaba mi vida y amaria mas aun lo que estaba por pasar, era una persona privilegiada y no lo queria cambiar po nada en el mundo. -Caro que bueno que ya estás despierta - dice mi madre entrando a la habitación sin tocar causando que rodará los ojos- Leonardo llamo hace un rato, llegara al medio día hija- está emocionada yo también lo estoy, es imposible no estarlo, todo estaba cobrando sentido, y estaba muy feliz ya era mas que hora de pasar al siguiente nivel. Mi novio Leonardo había organizado estas vacaciones, con mi familia y la suya, y mi madre y yo estábamos segura que me pediría matrimonio, el lugar era espectacular, yo lucia increíble, y estaba emocionada de algún día casarme con el hombre de mi vida, porque eso era Leonardo, el era perfecto, caballeroso, apuesto, elegante, de buena familia, juntos nos veíamos increíbles, y estaba mas que segura que tendriamos una vida maravillosa juntos, teniamos todo a nuetsro favor, lo teniamos todo para triunfar, yo no lo cambiaria a el por ningun hombre en el mundo. Saliamos desde que tenía 15 años ya era hora de dar el gran paso, todos nuestros amigos lo comentaban, y yo estaba deseando a qué el gran día fuera lo más pronto posible, estaba enamorada, irradiaba felicidad y no había nada que pudiera acabar con eso, era casi imposoible que algo o alguien dañara este dia tan maravilloso. -Me alístare mamá, no se en que momento me lo pida, estoy tan emocionada - chillo y ella se ríe de que también está feliz quiere a Leo como si fuera un hijo más, la verdad es que ella no podia estar mas feliz con el hombre con el cual habia decidido pasar mi vida. Mamá se va de la habitación dejándome sola para que pueda arreglarme, me doy una larga ducha me peino me maquillo y luego me visto con un vestido playero pero bonito y elegante, me veo en el espejo y no evito sonreír, no iba hacer humilde, yo era y estaba muy bella, esa era una realidad que no iba a negar, podía ser modelo, podía ser lo que yo quisiera ser, o eso decia todo el mudo, no es por ser vanidosa, pero ser bonita te abre muchas puertas en el mundo, y yo no era solo bonita, era hermosa y rica, el mundo era mio. Baje las escaleras y camine al jardín en dónde ví que se encontraban todos en el área de la piscina, estábamos en república dominicana, lejos de casa pero este lugar era mágico, no sabía que Leo tenía está casa me sorprendió mucho, pero me imaginaba que más que de el era de su familia, la familia de mi novio tambien era muy estable economicamente, no existian carencias, todo era lujos, no veia la hora en la que nos casaramos y empezaramos a formar nuestra propia familia. -Carolina cariño que linda estas- me saluda mi suegra a la cual le respondo el saludo con dos besos- mi hijo está dándose un baño en un rato estará con nosotros- ella tambien me queria mucho igual que mi madre a su hijo, aqui no habian peleas ni conflictos todo era paz y tranquilidad, y eso me gustaba, era mas que logico que nosotros estabamos destinados a estar juntos.. Mientras esperamos al que estoy segura será mi prometido hablamos mucho, todos nos conocíamos a la perfección, éramos muy allegados, nos conocíamos de toda la vida, mi familia se componía por mis padres, y mis 2 hermanos, todos solteros y muy codiciados. Y la familia de Leo por su madre, su hermana mayor la cual ya estaba casada y con un hermoso bebé de 6 meses y sus dos hermanos menores, se podía decir que nos llevábamos bien y eramos la típica familia de revista. -Ha ya están todos- escucho la voz de mi novio así que me paro y voy rápido a su lado lo había extrañado mucho, pero el no me abraza me aleja de su cuerpo con discreción, no entiendo. -Si te estábamos esperando- dice su madre con una sonrisa lo cual me alienta a tratar de abrazarlo de nuevo pero el de manera muy educada me hace a un lado- Que es lo que nos tienes que decir hijo? - todos sospechabamos de que se trataba pero eso no le quitaba emocion al asunto- estamos muy ansiosos. Me preparo para el momento estoy tan nerviosa, me va a pedir matrimonio y porfin seremos marido y mujer como tanto lo hemos deseado, como tanto hemos querido todo este tiempo, no había nada que desear más que esto, que estar juntos porfin, ya estaba imaginando la casa que nos compraríamos, nuestra boda la cual sería por todo lo alto, la mejor comida la mejor música la decoración todo, mi vestido, nuestros votos de amor, y sobre todo como serían nuestros hijos, como sería nuestra vida en familia, estaba tan contenta tan feliz, que sentía que nadie podía arruinar este momento, este iba hacer el momento mas hermoso de mi vida. -Se que quizás a todos les pareció raro que los reuniera, pero así como pedir su bendición para que está relación comenzará hoy también.... Antes de que pueda seguir hablando se escucha un taconeo y como de la nada entra ella, una de las mujeres que más detesto en el mundo, Ashley, ella fue compañera de mi novio en la escuela, era algo así como su mejor amiga nunca se le despegaba, nosotras nunca nos llevamos bien nuestro estilo de vida y nuestra manera de ser chocaban mucho, ella era escandalosa, vestía de manera muy sensual, mientras yo era más tranquila educada y aunque no era una santa siempre estaba bien vestida, como debía de ser, ella en ocasiones parecía treibolera, tampoco eramos del mismo ciclo social mientras ella estudiaba a base de becas y lismosnas yo tenia todo lo que queria, sonaba clasista pero sentia que ella era todo lo que estaba mal. -Hola a todos disculpen la demora, Leo amor ya estoy aqui- se acerca a mi novio y lo abraza lo que causa que estalle en celos, ella no debe de estar en este momento tan importante, no era parte de la familia tampoco nos llevabamos bien, ella sobraba aqui y en cualquier lugar en el cual yo estuviera. -Que hace ella aquí?- le pregunto a mi novio y el solo lanza un suspiro- pensé que eran unas vacaciones familiares Leo- ella se ríe y va a sentarse y yo solo quiero que me pida matrimonio de una vez y ya, porque no quería seguirle viendo la cara a esa tonta, yo estaba segura que ella en secreto estaba muy enamorada de mi novio, pero le tocaba ser espectadora. -Bueno, como les decía, yo pedí permiso para empezar una relación con Carolina, y ustedes me dieron toda la confianza del mundo, nunca me arrepentiré de los años que pase a su lado, ni de todo lo que fuimos juntos, pero así como les informe que comenzaríamos una relación hoy les tengo que informar que esa linda relación llega a su final- se me borra la sonrisa no entiendo nada, que le pasa? Esta no es la manera en la que imaginé que me pediría matrimonio. -Que dices Leo? No estoy entendiendo - soy la única que se atreve hablar y el me ve con pena en la mirada, porque no está feliz? No me va a pedir matrimonio? Que es lo que está pasando?. -Se que quizás debí de haber echo esto en privado Carolina, pero no pude lo siento, es mejor así, tu y yo no podemos seguir siendo novios, no es justo para ti, porque ya no te amo- juro que en la estancia sonó como mi corazón se partía, no estoy no era posible- yo estoy enamorado de otra persona, y esa persona va hacerme papá- escucho como todos están sorprendidos y hablan en voz baja mientras las lágrimas caen sin ningún tipo de control de mis ojos, esto debia de ser una pesadilla y ya queria despertar. -Leo eso no puede ser posible, no bromees con eso porfavor- le pido tratando de contenerme pero el niega, mi madre se para de manera rápida y se acerca a mi- Leo- le suplico y el se enoje de hombros, como si no supiera que decir, o como si le diera igual todo. -Lo siento- murmulla y es lo último que escucho antes de que todo se vuelva n***o.