Después de contarle a Armando lo que me contó Damián y que Luke confirmara su declaración y otras cosas más, armamos un grupo de seguridad tanto para Charlotte como para Arya. No pensé que se alterara tanto al ver que mi pequeña hermana estaba en peligro, hasta se le ocurrió la idea de traerla hasta su casa y encerrarla.
Creo que el idiota sí está enamorado de verdad de mi hermana.
Salimos hacia la sala y vemos a Andrés y a Donna, parecen muy contentos; aun así, puedo ver la tristeza y duda de mi hermano.
— ¡Connor! — la veo amarrada a los brazos de Andrés —. Te dejaría calvo por llevarte a mi esposo por tres semanas. Lo extrañé mucho.
— Yo también te extrañé, mi Zucaritas. Y mira dónde estás. Una vez más en la casa de tu jefe. —Eso sonó como reproche.
Donna me mira, y se hace u
