17 de mayo de 2007

635 Words

17 DE MAYO DE 2007 Pasé unas horas en la playa tal como Umberto me había aconsejado. El suave calor del sol le sentó bien a mi piel, pero imaginaba sus rayos sobre la piel bronceada de mi amante, Gaia. Y a ella también la imaginaba junto a mí. Debía confiar en mi memoria e imaginación para lograr aquello, lo cual me causaba sufrimiento. Con el paso de las horas, cansado de la soledad de la playa, subí las escaleras hasta Casa Albertina y entré en mi habitación. Las finas cortinas se abrieron y una suave brisa pasó junto a estas y penetró vagamente en la habitación. Me senté al borde de la cama y miré fijamente al suelo. Tras unos instantes me levanté y deambulé alrededor de la cama, haciendo círculos circunscritos en el diseño de la alfombra. Aunque aquella era “mi” habitación, realment

Free reading for new users
Scan code to download app
Facebookexpand_more
  • author-avatar
    Writer
  • chap_listContents
  • likeADD