Jeros.

Capítulo 17.

—Maldición .—Ares golpea la pared de la celda—Ve con Diego .—Me mira y asiento.

Salgo corriendo lo más rápido que puedo, llegó a la casa adentrandome rápido.

—¿La encontraron? —Eros me intercepta mientras camino por el pasillo de la planta baja.

—No, es como si la tierra se la hubiera tragado, no hay rastro de ella o de los otros lobos —

Me detengo antes de entrar, Eros toma mi mano observandome preocupado.

—Los capturamos hace unas semanas, estaban merodeando la manada, no creí que ella los conociera .—Pego mi frente a su pecho—Eso significa que tenía todo planeado desde hace tiempo .—Suelto un suspiro, Eros me abraza, solo cierro mis ojos, estar entre sus brazos me da tanta paz.

—La encontraremos .—Nos aleja, deja un beso en mi frente, nos damos una última mirada adentrándonos en la habitación en penumbras, el corazón tranquilo de Diego nos tranquiliza.

Nos acercamos a él, lo observó y sonrió.

—Estoy bien, así hayan pasado unas pocas horas, el lazo poco a poco se ha ido desvaneciendo .—Su voz se oye rasposa, se voltea quedando boca arriba, aún tiene heridas en su cuerpo, pero no tantos —Es tan raro verlos así .—Eros se acerca ayudándolo a sentarse recostando la espalda en el respaldar de la cama —Realmente es tan raro, luego de ser espectador de su relación de tira y afloja, de su odio mutuo que por cierto lo inició Eros ver todo eso, los golpes, las peleas, los insultos¿Y ahora estoy? Vaya la diosa si supo elegir bien—

—Ni que lo digas hermano, verlos a estos dos ahora llenos de amor me dan tanta diabetes.—La risa de Félix llena la habitación—Y más cuando Janelle vio todo el paquete de Eros desde que estaba pequeño—

Me río mientras que Eros gruño con sus mejillas sonrojadas.

—Mejor no hables —

—¿Por qué no hermano? —La voz risueña de Ares nos interrumpe —Felix tiene razón, ella te vio hasta el alma cuando estabas pequeña, hasta te limpiaba .—Eros gruñó cruzándose de brazos, me acerco y lo abrazó —Todavía recuerdo como novias tus nalgas al aire frente a Janelle —

Me río ganándome el gruñido de Eros, lo miró y le Hago un puchero que él no duda en besar, sonrió aún con sus labios junto a los míos.

—Esto será difícil de ver .—Felix se sienta en la cama —¿Cómo estás? —Felix dirige la mirada a Diego.

—Estoy bien, poco a poco el lazo se desvanece .—Nos da una sonrisa sincera.

—Además Janelle siempre ha visto a Eros.—Diego habla para desviar la atención de él, pero por favor no te metas conmigo.

—Eso es cierto .—Felix asiente con una sonrisa.

—Totalmente cierto .—Meto mi cabeza en el pecho de mi mate que vibra por reírse.

—¿En serio? —La voz de incredulidad de Eros me hace llenarme de nervios.

—No digan más .—Los miró cruzándome de brazos, Ares me da una mirada.

Me las pagarás.

—Ella siempre estaba pendiente de ti, pendiente de lo que hacías y con quién, se entiende te odiaba, porque ella te odiaba, pero siempre estuve al pendiente, con decirte que corría a las chicas para que no se acercarán a tí —

Maldito alfa de pacotilla.

Levanta la vista nerviosa, Eros me mira con una hermosa sonrisa.

—Tú .—dice juguetón dejando un beso en mis labios.

—Dan diabetes —

Me suelto de Eros rodando los ojos.

—Ya vuelvo .—Dejo un beso en la mejilla de mi alfa y salgo.

Por la diosa me siento como una niña, con las emociones al mil y con elefantes en mi barriga.

Camino hasta salir encontradome con mis padres caminando de un lado a otro, ellos me miran colocandose rígidos.

—Tranquilos .—Camino dejando un beso en la mejilla de ambos.

—Es que, nosotros.—Mamá se traba.

—Ya lo sé, digamos que salir de la manada fue algo productivo, se que el color de mi cabello en blanco ahora se porque es de ese color, por eso cuando salí y alguien me dijo que tenía un lindo rubio me asusté .—Tomó la mano de manos, mis padres se miran, están aterrados, los comprendo, piensan que los odiare —Ese dia supe que algo pasaba —

—Solo los miembros de la manada saben cuál el verdadero color de su cabello, no lo sabe nadie externo, para ellos es rubio como el de tu madre, debíamos hacer algo, el color de tu cabello te delataba, delataba que no eras una beta normal, lo lamentamos mucho mona, te ocultamos cosas, nosotros creímos —

Mamá llora y papá no duda en abrazarla, me acerco a ellos uniéndome.

—Todo está bien, no estoy enojada, se que para ustedes fue difícil, creyeron que eso fue lo mejor —

Ambos me miran dejando un beso en mis dos mejillas.

—¿Por qué tantas lágrimas? Se que me extrañaron, pero esperaba más alegría—

Esa voz la conozco bien, me suelto de los brazos de mis padres volteandome, sonrió enormemente corro y ambas nos estrechamos en un abrazo.

—Te extrañe tanto mi blanca .—Susurra.

—Yo más mi rubia .—Nos separamos tomadas de las manos.

—Ahora sabes porque te decía blanca .—Pasa sus manos por mi cabello —Y me enteré de las nuevas, eres la mate de Eros felicidades, ya lo

decía yo .—Isabella me vuelve a abrazar—¿Qué tal si salimos a algún bar o alg—

Junto mis cejas al ver todo al revés, bella abre su boca negando.

—Eros baja en este instante a mi blanca .—Se acerca, pero él se aleja.

—Ella es mía.—Mi alfa empieza a caminar y yo lo único que veo es sus perfectas nalgas.

Quiero morder una.

—Janelle deja la morbosidad para después, dile que te baje .—Bella camina detrás de mí.

—Yo .—Bajo la vista nuevamente —Lo siento soy débil .—La risa de Eros me hace jadear.

—Mira como me la tienes Eros. —No se que hace yo solo observo el cuarto de mi alfa.

—Yo no hice nada .—Mi alfa camina cerrando la puerta con seguro.

Me baja lentamente pegandome a la pared.

—¿No te importaría que me vaya a la disco?—Le digo de lo más normal, mi mate solo me observa negando—¿Entonces por qué me trajiste aquí? —

—Porque quise y porque tú y bella son un peligro juntas .—Besa mi cuello.

—Entonces no te importará que me vaya a la disco y busqué a alguien .—Lleva sus manos a las mía elevandolas manteniendolas pegadas a la pared, con su pierna abre las mías—¿No verdad? Creo saber que tu en algún momento dijiste que nunca sentirías celos hacia tu mate, entonces no te importará que baile con otro, que otro me mire .—Su gruñido estremece mi cuerpo.

Su agarre se hace más fuerte.

—No juegues conmigo .—Tensa su mandíbula.

—¿Quién dijo que estoy jugando? Estoy diciendo la verdad —

Me encanta jugar, me encanta quemarme.

—Eres mía Janelle, cada parte de tu cuerpo me pertenece, no dejará que nadie toque lo que me pertenece .–Baja su manos levantándomi mentón, toma con su otra mano las mías —Eres mía .–Sonríe cuando empiezo a ronronear buscando más su cercanía, diosa mía, diosa desgraciada eres la mejor—¿Eres mía?.—Pregunta con ese tono seductor, sus ojos se oscurecen y sus feromonas de macho alfa me envuelven —Dilo .–Muestro mi cuello.

—Soy tuya Alfa .—Suelta mis manos, llevándolas a mis piernas impulsando mi cuerpo, enredo mis piernas en su cuerpo.

—Me enferma pensar que otro te toque, me vuelve loco, estoy celoso, muy celoso lo estuve desde el principio, no soporto pensar que otro te tenga, que otro te toque, me vuelve loco pensar en aquellos que te tocaron, que tocaron a mi mujer. —Besa mi cuello —Soy tuyo—

—Eros .—Jadeo.

Amo, amo a este alfa, amo con locura a este niñato.

Diosa debiste darme un mate más feo, mira lo bello que te quedó.

—Mi hermosa mate ¿Querías que fuera más feo?—Se sienta en la cama conmigo en sus brazos.

—Es que mírate .—Agarro sus mejillas.

Parezco una niña diosa, estoy actuando estúpidamente, maldita sea, no me agrada jugar así.

—Hemrosa, me gusta esta forma de actuar, me gusta todo de ti, me gista que seas una mestiza, me importas tu y que seas mestiza solo es un bonus, todo tu me vuelve loco.—Besa mi frente.

—Deja de meterte en mi mente .—Mi mate solo niega.

—Me encanta que tú parte omega este más presente, te hace más tierna, cuando la aceptes serás una diosa, ahora eres una reina, pero luego serás una diosa, mi diosa.—Ronroneo —¿Qué debo hacer para que tú instinto de omega me acepte? —Cae en la cama conmigo —

Muerdo mis labios colocando mi cabeza debajo de mis manos.

—Nada, es algo loco, pero siento que ya te la ganaste, con todas esas palabras y acciones, Eros ya te la ganaste .—Su sonrisa calienta mi pecho.

—Ahora solo falta que tú la aceptes, que aceptes ser una mestiza para que ambas partes sean una —

Dejo caer mi cabeza en su pecho suspirando.

—Es complicado —Su mano en mi cabeza me da mimos.

—Tiene que serlo, siento tu conflicto hermosa—

Ninguno dice otras cosas, Eros nos acomoda quedando frente a frente, cierro mis ojos acurrucándome más a su cuerpo.

El latir de su corazón me tranquiliza más.

—Dan asco .—La voz de Bella se escucha divertida.

—Deja de escuchar nuestra conversación.—Eros dice bajo, siento como besa mi frente, mantengo mis ojos cerrados.

—Solo escuche los último y fue sin querer, das asco —

—Te veré cuando encuentres a tu mate —Susurro, me tapo la boca cuando bostezó.

—Eso no será pronto, dan diabetes, tardaré en acostumbrarme a verlos y escucharlos .—Hace una pausa —Diosa está casa, mejor me voy a dar una vuelta —

Me río, beso el pecho de mi alfa ronroneando.

—Ella será peor .—mi mate me abraza un poco más, pero sin apretarme tanto —Te amo hermosa, descansa —

—Te amo más mi alfa—



Necesito su ayuda en elegir un mote para Janelle.

Para que Eros le diga.

No sé..

¿Ustedes que piensan de mi mestiza? Se escucha feo.

¿O de mi omega?

¿Mi beta?

¿Ustedes cuál dicen?

Nos leemos pronto..