No es que Holly no lo permitiese tomar a Ally, de lo contrario, él se ofrecía cuidarla demasiado, solo que para Holly le incomodaba, no lo decía pero si se notaba.
***
—Con una mierda. —Maldice Ascher por el teléfono mientras hacía su maleta.
Él estaba en Londres, aún en la casa de sus abuelos, llegaron las vacaciones y le tocaba irse a Miami como siempre a mantener las empresas y a visitar a sus amigos. No se ha olvidado de Holly, de hecho, cada vez que va, espera encontrarla, ha malgastado dinero en muchos detectives para encontrarla, pero estos no encontraban ningún rastro o eso es lo que le hacía pensar Roberth.
Por cada falla, Ascher despedía a los detectives y contrataba a unos nuevos, no sé iba a cansar de buscarla, se ha vuelto hasta un poco loco por eso, es que solo creía sería un por un tiempo que no la vería, pero ese tiempo se ha vuelto una eternidad.
—Llevo un año en esto y no la consigo Jackson —dice Ascher por la llamada.
—¿Un año? ¿No crees que deberías parar? Descansa, concéntrate en tus estudio —le aconseja por el otro lado.
—La amo con locura Jackson, todo en mi está bien, mi trabajo, los estudios, mi futuro está asegurado, descanso bien, te lo juro, pero quiero verla Jackson, yo la amo y no quiero estar así, es que si por lo menos supiera dónde está, estaría más tranquilo. —Ascher ha estado sufriendo en silencio aunque no lo parezca.
—Ni me lo digas, a veces Samantha se pone a llorar porque recuerda cuando se despidió, pero detesta no saber a dónde se fue. —Suspira Jackson.
—Pensé que habías terminado con ella. —Se sorprende Ascher.
—Decidimos seguir a distancia, es duro, pero nos hemos mantenido muy bien —dice muy positivo.
En enero de este año, Jackson se fue a la universidad, no fue antes porque se había tomado unas vacaciones para estar con Samantha y pocas veces hablaba con Ascher para comunicarme sus situación sentimental, además de que esté andaba muy ocupado, así que no quería molestar a su amigo.
Jackson está estudiando finanzas para heredar las empresas de su familia, él no sabía que estudiar, así que optó por esa carrera, mientras que a Trevor le encantaba la medicina, quería ser un gran doctor, sus amigos se sorprendieron por eso, pues no vaya ser que el paciente deba venir de clase alta para que Trevor lo atienda, pero él ha cambiado, de hecho, parece ser mejor amigo de Mónica.
—¿Y Trevor? —Se interesa Ascher.
—También debe llegar hoy, supe que Ashly y el terminaron, ¿sabes algo al respecto? —indaga Jackson.
—Ashly me dijo que era porque no quería tener una relación a distancia y que quería entrar a la universidad soltera porque quiere experimentar muchas cosas —recuerda Ascher cuando su hermana se fue a Londres a estudiar con él, solo que ella estaba en otra universidad y viviendo en las había del campus.
—Y porque él muy pendejo está enamorado de Mónica pero no lo quiere admitir, aparte de que Mónica está de novia con tu guardaespaldas Agustín —concluye Jackson, él sabía todo, pero no quería aterrizar el tema con imprudencia si Ascher no estaba informado.
Ashly, la oveja negra de la familia, ha tomado un camino diferente, ella está estudiando Artes y fotografía, cada sábado va a una escuela de baile. Para Elizabeth es la deshonra de la familia, mientras que para Roberth y Ascher es el honor que al fin alguien hace algo diferente que no tenga que ver con negocios. Ascher una vez le dijo a Ashly que si estudiaba eso, se estaría llevando gran parte de él, pues a Ascher le encanta el arte, peo solo es como hobbie, de igual forma, la arquitectura es arte, así que no se escapara de ella.
—¿Vendrás con Ashly? —pregunta Jackson.
—No, ella dijo que estaba muy ocupada, tiene muchos proyectos y campeonatos —responde Ascher.
Ascher no estaba molesto con Trevor por enamorarse de Mónica, al contrario, sabía que tarde o temprano lo haría, aparte Ashly es una chica muy madura, que no le afecto en nada, ella prefiere ver a Trevor feliz y bueno, ella está ocupada tratando de ser feliz sola, por mucho tiempo sus padres se lo prohibieron, pero mágicamente algo ha hecho de que Roberth abriera los ojos y sea más comprensivo con sus hijos, quedando Elizabeth cómo la mala.
Ashly terminó con Trevor para que este se diera una oportunidad con Mónica, pero está ya andaba de novia con Agustín Ramos, el guardaespaldas y mejor amigo del socio de Ascher, Alessandro Libertella, la relación de Ashly y Trevor iba para un año, solo estaban de probando, y en lo que iba terminando, Mónica iba iniciando con Agustín, al fin ese chico se había dado una oposición después de la relación tóxica que tuvo con Lourdes.
***
—Si mamá, ya llegamos —habla Holly por teléfono, tenía a la bebé en sus brazos y estaban saliendo del aeropuerto buscando a un taxi—. Ay Dios, si me voy a cuidar, te lo prometo, no haré una estupidez, aquí está Liam, él te lo puede asegurar y también permitiré que me cuide.
Liam llevaba las maletas y encuentra un taxi, Holly se ríe con fuerza al escuchar sus hermanos en la llamada, estos se estaban despidiendo nuevamente, ya era como la tercera vez que lo hacía.
—Mamá debo colgar. —Holly se pone como fantasma al ver a lo lejos a alguien reconocible.
Era Ascher, saliendo del aeropuerto, Holly se voltea con rapidez para que esté no la notase y se entro con rapidez al taxi, luego Liam entró después de guardar las maletas y el taxista arrancó. Ella ruega porque Ascher no la haya visto, su corazón se aceleró a mil, jamás lo había recordado tan guapo, vestía de traje y como siempre parecía de más edad, nunca creyó que él estaría en un aeropuerto público, tiene suficiente plata como para tener uno privado.
Llegan a la casa de Samantha y Holly toca el timbre un poco ansiosa, no sabía si la recibiría bien. La verdad tenía mucho miedo, ni siquiera sabía si estaba en casa.
—¡Ya voy! —Una voz femenina grita desde adentro y seguido de esto abren la puerta.
Samantha se paraliza y la mira de abajo arriba, no creía que fuera real, con muchas quiere abrazarla, pero se contiene por el bebé en su brazos.
—Yo las ayudo. —Liam toma a Ally y permite que Sam la abrace.
—Pensé que no te iba a ver más nunca. —Llora Sam—. Jackson es testigo de mis noches en lágrimas.
—¿Y él está aquí? Es que no quisiera… —Sam la interrumpe.
—Entiendo, pero tranquila, él no vendrá hoy, acaba de llegar y tiene asuntos con su padre. —Se separan del abrazo y se hace a un lado para dejarlos pasar, luego los ayuda con la maleta y el bolso.
—Eso significa que no te llevará al baile de tu último año. —Deduce Holly.
—Ya no lo necesitaré si te tengo a ti. —Vuelve a abrazarla—. ¡Mónica! —grita.
—¿Está aquí? —Holly no se lo esperaba.
—Por supuesto, nos vemos todos los días en tu honor. —Le sonríe mientras se separa.
—Es tu casa, tu visita —dice Mónica bajando las escaleras y cuando logra ver a Holly, la abraza de inmediato—. ¡Dios mío! Tienes a Ascher buscándote por todos lados.
—Lo vi en el aeropuerto, espero que no me hay visto. —Ríe nerviosamente.
—¿Ignoraremos al bebé? —Mónica lo toma en cuenta frunciendo el ceño y se separa del abrazo.
—Yo iba a preguntar él después de saber de la vida de Holly —dice Samantha un poco avergonzada.
—Es niña y es parte de mi vida, es mi hija y Ascher es el padre. —Hollh se pone cabizbaja.
—¡Soy tía! —Celebra Samantha dando brincos como niña.
—Ya puedo entender porque te fuiste, si la madre de Ascher te metió presa solo por estar con su hijo, supongo que hubiese hecho algo peor si esperabas un bebé de él —dice Mónica comprendiendo la situación.
—Así es, pero no aguanté más y no solo vine a asistir a su graduación, sino también a contarles la verdad, me estaba consumiendo por no saber de ustedes. —Se lamenta Holly.