La brisa golpea con fuerza el mar haciendo que altas olas se eleven a lo alto dando una belleza a las hermosas playas donde centenares de turistas disfrutan del merecido descanso. Entre tanto turista se encuentra un trío muy particular que reposa en unas tumbonas bajo unas enormes sombrillas. Cada una tomando unas bebidas costosas y refrescantes. — ¡Este lugar es maravilloso! — exclamó una de ellas— ¿Quién será el dueño? Brianna al escuchar a su amiga miró el lugar y sonrió. —No tengo la menor idea— dijo la mujer que vestía un traje de baño entero—, pero el dueño debe estar forrado en dinero. Las mujeres rieron. — ¿Qué vamos a hacer? — dijo Maicol furioso. Se sentía burlado y veía a las dos mujeres muy tranquilas ante la situación que se había presentado el viernes. Ya ese día era do
Download by scanning the QR code to get countless free stories and daily updated books