Pov. Molly
He decidido que este fin de semana será solo para mi novio, ya que lo he tenido descuidado y como no tengo viajes de trabajo lo sorprenderé, no le dije nada porque he decidido que es hora de aceptar su propuesta de irnos a vivir juntos.
Lo amo con locura ¡no!, lo quiero, sí, pero ya es tiempo de dar este paso así que decido ir al mercado y prepararle una cena.
Llego a su departamento, el cual está ubicado en uno de los lugares más caros de Boston.
Ingreso con la llave que me dio hace tiempo, lo reviso con la mirada y me doy cuenta de que siempre a él le han gustado los lujos y siempre lo he cuestionado de como los obtiene.
. —un departamento que ni vendiendo mis órganos podría pagar, y eso que mi salario me permite tener uno en un lugar tranquilo y vivir cómodamente.
Siempre me dice que hace buenos negocios y listo; jamás lo cuestiono porque sinceramente no me importa. No lo cuestiono término de entrar y me pongo manos a la obra.
Son las nueve de la noche y él, ni sus luces, lo llamo, pero su celular está apagado, y así pasan las horas y las velas se consumen, cuando despierto, son las 6 de la mañana, me levanto y miro por el departamento y él no llegó.
Ordeno todo y lo dejo como lo encontré, cuando salgo escucho el ascensor abrirse, por instinto o porque mi corazón sabía que algo pasaría me escondo detrás de la puerta de la escalera de escape.
Y sin hacer ruido salgo despacio y veo a mi novio comiéndose los labios de una mujer que bien podría ser su madre, su mano tiene sujeto uno de sus pechos y la otra mano se pierde debajo del vestido de la mujer la cual parece disfrutar. Sin pensarlo saco mi celular y tomo unas cuantas fotos y videos.
A la mujer solo le veo el perfil, pero la he visto en algún lugar hasta que suelta sus labios y baja a su cuello, sin pensarlo él desabrocha su pantalón y desenfunda su prominente erección, la penetra y la cara de satisfacción de la mujer es gloriosa. Y atreves de mi celular me doy cuenta de que es la mujer de mi amor, o sea de Olis mi jefe.
Termino de grabar cuando ambos acaban y si más se besan e ingresan a su departamento, ahora entiendo el porqué tiene dinero sin trabajar.
Salgo por inercia del edificio, me dirijo a mi auto y me debato en lo que debo hacer. Pienso en mi jefe en lo que sufrirá cuando se entere de que su esposa lo engaña con muchachitos, ahora la odio aún más.
No sé qué sentir, se supone que debería estar llorando a mares porque mi novio me estaba engañando, pero me duele saber el dolor que sentirá mi jefe. Me debato en sí hacerlo o no.
Así que tomo mi celular y marco a mi jefe, que por cierto no contesta. Desisto y llamo a Marcela, mi mejor amiga, iría a casa de mis padres, pero ellos decidieron irse a Tucson por problemas médicos de mi madre.
LLAMANDO …. MAR
Mar: que paso chica no se supone que a esta hora deberías estar en brazos de tonto inútil.
Molly: acabo de salir de su departamento y el maldito no llego a dormir, pero eso no fue lo más terrible sino que, cuando me estaba yendo, él llegó con una mujer y se la cogió en su pasillo y si eso no fuera poco esa mujer es la esposa de mí olí, te imaginas lo que sufrirá el pobre, él la ama, la idolatra. — y sin más me largo a llorar, no por el engaño de mi exnovio, sino por el dolor que esto ocasionara a mi amado jefe.
Mar: te estás escuchando, me estás diciendo que está sufriendo por tu jefe y no porque viste follando a tu novio con otra vieja.
Molly: un silencio que solo confirman las palabras de Marcela, pero que podía hacer me había enamorado de mi jefe casi 4 años atrás. — tienes razón amiga.
Mar: te paso a buscar a la noche y te llevaré a un lugar que te encantara, pero lo mejor de todo es que podrás conocer a un hombre que te saque esas telas de araña que cargas entre tus piernas.
Molly: acepto. — ya era hora de salir de mi lugar de confort y lo más importante de olvidar.
Mar: te quiero hermosa perra, adiós.
Aún sentada en mi auto, decido que hac… El sonido de mi celular indicándome que mi jefe me llama hace que mi corazón se detenga por la emoción.
LLAMADA ENTRANTE… jefe OLIS.
M: jefe, buenas tardes. — saludo como siempre.
O: Buenas tardes, Molly, dígame a que debo su llamada anterior. — salgo de los pensamientos lujuriosos que me hace tener mi jefe, cada que me habla, es que su voz me hace sentir cosas; podría compararlo como tener un orgasmo auditivo.
M: jefe, disculpe que lo moleste, pero debo contarle algo que acabo de ver y tengo pruebas. Y es sumamente urgente.
O: Está bien Molly, voy a su departamento.
No me deja responder, ya que corto. Y de pronto me doy cuenta de que estoy a solo unas calles de mi departamento. Llego en solo 3 minutos.
Pasa una hora y ni sus luces, así que decido que ya es tiempo de ir arreglándome para mi salida con Marce.
Ya cuando estoy duchada, depilada, me maquillo y decido ponerme un vestido n***o con mangas largas, pero con un escote prominente por delante y detrás cubierto por completo, dejo mi cabello rojo fuego suelto unos tacones rojos como mi cartera de mano.
Una vez lista, me dispongo a salir porque la loca de mi amiga está en el taxi esperando, cuando subo un mensaje de mi jefe llega y me doy cuenta de lo poco que le importo la información que le tenía.
Me trago mi decepción y me dispongo a enviarle un mensaje a mi exnovio.
F: vete a la mierda, idiota. — junto con una de las fotos que le tome. Ya con eso, bloqueo su número.
Marce mira los videos y las fotos. Y me pregunta si estoy segura de lo que haré, ya que iré a buscar mi liberación.
Antes de llegar al lugar, el cual parece una fábrica, pero con luces y gente entrando por distintos lados. El auto se detiene a unos cuantos metros de la entrada, cancelamos el taxi y bajamos.
Antes de dar unos pasos Marce me detiene y me entrega un antifaz rojo, lo cual me causa gracia porque es una combinación, me lo coloco y Marce el de ella, el cual es dorado con su vestido verde musgo, que la hacen ver bellísima.
Ingresamos y hay gente, pero no atiborrado, le pregunto a marcí el valor de ingreso y me informa que cuesta la módica suma de tres mil dólares por persona. Cuando termina de decirme el valor me detengo y la miro con mis ojos abiertos de una manera que la hacen reír.
. — es tu regalo de cumpleaños. — me recuerda que el lunes lo será.
Muchas gracias, digo cuando estamos en la barra, yo pido una copa de vino la cual se convierten en 8 y de un momento a otro mi amiga me informa que su pareja llego y sé irá a ver el cielo. Yo asiento con mi copa.
Pasan 2 horas y mi pareja nunca llego así que tomo mi bolso, me paro erguida y con paso firme decido irme, le envió un mensaje a Marce, nos vemos mañana😉.
Al salir del lugar el viento hace que un pequeño mareo me azote. Al de seguridad le pregunto dónde puedo tomar un taxi y cuando voy caminando un mensaje de la app del sitio en donde el tipo me dice que se arrepintió, que lo disculpe.
. — pero gracias a las copas de vino de más que tengo en mi cuerpo, aunque creo fueron 8 o 10 ya no recuerdo, tomo mi celular y envió un audio dejando ver mi frustración y decepción.
Sabes, no necesito ser follada por un p**o chico con complejo de cualquier cosa, y no porque mi novio me engañe con una mujer de 43 años y no contemos que es la esposa de mi jefe; quien no me vería así estuviera desnuda frente a él.
Envió el audio al sistema y me doy cuenta de que un hombre está frente de mí escuchando mi audio, una risa brota de su garganta. Y por inercia giro y sin darme cuenta de que la acera se me termina y cuando ya siento que me tendrán que reconstruir mi bello rostro por el golpe contra el suelo,
unas manos afirman mi cintura y un perfume conocido llega a mis fosas nasales, su rostro cubierto con una máscara al igual que la mía, pero sin pensarlo mis labios se juntan con los suyos, espero que me detenga, pero es todo lo contrario porque me devora mis labios de una manera de la cual jamás lo han hecho.
Nos enderezamos sin soltar los labios del otro, su lengua profana mi cavidad bucal y eso me tiene completamente excitada.