Déjame luchar por tí.

Capitulo 32.

- Eden dormía en los brazos de Maximiliano cuando lo que ella creía era un sueño pero en realidad era un recuerdo, vino a su mente.

- Eden caminaba por un largo y enorme pasillo, las paredes a su alrededor eran de gran altura y había flores blancas en los costados, ella llevaba un vestido largo y pomposo, sus zapatos le quedaban algo apretados y se sentía incómoda. De repente una enorme puerta se abrió, un hombre le decía que pasará y ella lo hizo, entro a un enorme salón, camino un poco y vio a su abuelo José sentado en un enorme asiento, él se veía más joven y atlético, a un lado de él se encontraba Marian con un largo he impresionante vestido.

De un momento a otro Eden se encontraba al lado de Elena, se veía más joven y la miraba con soberbia; en ese momento entro Maximiliano por otra puerta y ambas sintieron, Eden se sintió incómoda pero aún así fue en dirección de Maximiliano, pero este la esquivo cuando ella estuvo a punto de abrazarlo, él se acercó a Elena, la tomo entre sus brazos y la cargo. Las lágrimas de Eden comenzaron a salir, sentía un dolor profundo en su corazón; Maximiliano volteo a verla y de la manera más cruel le dijo "Enserio creíste que en este ocasión serías tú, deberías de darte por vencida".

_ Amor despierta!.

- Eden lloraba sin parar mientras Maximiliano trataba de despertarla. Ella sudaba frío y decía cosas que él no comprendía.

_ Maximiliano, Nooo...

- Por fin despertó pero al ver a Maximiliano lo abrazo con fuerza y continuo llorando de manera inconsolable.

_ Tranquila, estoy aquí.

_ Maximiliano yo...

_ Mírame, tranquila solo fue una pesadilla.

_ Se sintió muy real.

_ Que fue lo que soñaste.

- Eden le contó su sueño a Maximiliano, la tomo fuerte entre sus brazos y la beso.

_ Eso jamás va a pasar, no hay manera o persona que me aleje de ti.

_ Pero no crees que todo ha pasado tan rápido, y si un día te das cuen...

_ Nisiquiera lo digas, yo no tengo dudas Eden. Eres lo mejor que me ha pasado y lo más valioso de mi vida, te amo y sé que esto ha pasado muy rápido pero no puedo evitarlo, todo lo que siento por ti es tan real, es como si todo hubiese estado en mi corazón desde antes que tú llegarás solo esperando a que un día aparecieras y tomarás cada cosa de mí.

- Eden beso a Maximiliano cómo jamás lo había hecho, aquellas palabras fueron lo mejor que había escuchado en su vida, a pesar de que todo era tan real que le daba miedo, sabía que valía la pena tomar el riesgo y luchar por Maximiliano tanto como él está dispuesto a luchar por ella.

****

- Era temprano y Elena se preparaba para ir a casa de Maximiliano, había pasado cada día con Alvaro y seguían siendo amantes, ahora que se sabía lo que ellos eran era momento de cambiar de plan. Ella creía que aún podía jugar una carta más con Sam pero desde ayer no le contestaba, así que tuvo que aceptar el plan de Alvaro.

_ Estás lista?.

_ Estás seguro que esto funcionará?.

_ Porqué dudas?.

_ No se te ocurre que si Maximiliano está dispuesto a hacer todo por Eden, ella también estará dispuesta a hacer lo mismo por él.

_ Eso es imposible.

_ Porqué?.

_ Porque ella me ama a mí.

_ Me dices lo mismo desde que esto empezó pero no veo a Eden tan convencida como tú.

_ Eso es porque Maximiliano se ha encargado de confundirla, pero entre ella y yo hubo algo desde el día que nos conocimos, solo necesita alejarse de Maximiliano y volver a esta casa, después de eso no tardará mucho en resolver su confusión.

_ Estás seguro que el confundido aquí no eres tú?.

_ Ya te dije que no.

_ Qué hay de Max?. Él es tu hijo y pero pareciera que lo has olvidado.

_ No digas tonterías, también pienso en él. Que clase de padre sería si lo dejara a lado de una mujer que ama a tro hombre.

- Alvaro salió de la habitación, Elena solo se quedó mirandolo hasta que desapareció de su vista, aún se cuestionaba si Alvaro le decía la verdad, a ella le había dicho desde un inicio que había tenía un sentimiento mutuo con Eden, se veía tan convencido que ella le creyó cada palabra pero ahora dudaba de aquello. Eden no parecía compartir la idea de Alvaro, si eso era así no lo hubiese rechazado en su supuesto encuentro. Al final Elena creyó que estaba pensado de más, lo mejor era seguir el plan de Alvaro y recuperar a Maximiliano cuando se sintiera vulnerable por el abandono de Eden.

****

-En casa de Maximiliano...

Camí sonreía, estaba preparando el desayuno junto a Eden antes de seguir con su día; las semanas en aquella casa habían sido las mejores de su vida, sentía que por fin estaba con una familia.

El timbre sono y ambas pensaron que se trataba del abuelo José, habían quedado de verse esa mañana y alcanzar a Maximiliano en la empresa.

Camí abrió la puerta con una enorme me sonrisa, pero en cuanto vio de quien se trataba la sonrisa se desvaneció. Ella no sentía odio hacia su padre, pero sabía lo que le había hecho a Eden así que comenzó a tenerle miedo.

_ Mi niña, no piensan saludarme.

- La mirada de Alvaro era distinta y Camí se dió cuenta, su papá solía ser un hombre consentidor y bueno pero al hombre que tenía en frente parecía no ser el mismo que ella conocía.

_ Camí, quien es?

- Eden salió de la cocina y vio a Alvaro parado en la puerta, inmediatamente corrió hacia Camí y la puso atrás de ella.

_ Qué hace usted aquí?. No puede estar aquí, hay una orden de restricción.

_ Creo que después tendré que corregir tus modales Eden, esa no es manera de tratar a las visitas. En fin, ese solo es un papel, a demás, tengo todo el derecho de ver a mi hija.

_ Eden sabía que en algo tenía razón, no podía negarle acercarse a Camí. La pequeña apretó fuerte su mano, ella giro a verla y se dió cuenta que Camí estaba muy asustada, en ese momento escucho otra voz.

_ Tiene razón Alvaro, no puedes negarle ver a Camí.

- Camí volteo a ver a la mujer que estaba al lado de su padre, en ese momento la reconoció, ya había visto a Elena un par de veces al lado de su hermano, en ese momento ella se sintió molesta y abrazo con más fuerza a Eden.

_ Hola pequeña, me recuerdas.

_ Tu salias con mi hermano.

_ Así es, nos veíamos lindos no crees?

_ No, se ve mejor con Eden.

- El rostro de Elena se notó molesto pero no era la única enfadada, Eden no podía creer su cinismo, era la amante de Alvaro y la madre de Camila pero aún así no parecía sentir vergüenza de haberse involucrado con padre he hijo.

_ Camí sube a tu habitación.

_ No quiero.

_ Ve, yo estaré bien ok.

- Cuando Eden vio a Camí subir pudo expresarse como quería.

_ Aunque no puedo impedirle ver a Camí, no puede venir aquí. Si quiere verla en realidad tendrá que platicar con mi esposo.

_ Vaya, tan rápido te aconstumbraste al papel de esposa.

_ No me aconstumbre Señora Elena, ese es mi papel en esta casa y en la vida de mi esposo.

- Elena cada vez estaba más molesta, en un principio creía que Eden sería una chica con carácter docil pero al parecer se había equivocado.

_ Eden, no venimos a importunar, en realidad queremos proponerte algo.

_ Yo no tengo porque escuchar ninguna propuesta, así que salgan de mi casa ahora mismo!.

_ Pues tendrás que escucharnos si no quieres perder a Camila.

_ No dejaré que se la lleven.

_ Pues entonces tendrás que oír lo que tenemos que decir. Elena quiere recuperar el tiempo perdido, así que quiere llevarse a Camí con ella y yo estoy de acuerdo, ella debe de estar con su madre.

_ Es usted un bastardo, cómo piensa hacerle algo así a Camí, solo es una niña.

_ Veo que la quieres mucho. Bien, si tanto la quieres podemos llegar a un acuerdo.