48. Lobos y Hechizos

1549 Words

Tiempo después, cuando los escoltas ingleses, acompañados por los Sullivan, concluyeron su destructiva inspección, la satisfacción en sus rostros era evidente. Patrick, con una sonrisa maliciosa que no auguraba nada bueno, se acercó a Lugh. Su voz, rebosante de veneno, resonó en un susurro: —Lo mejor que pueden hacer es unirse a los ingleses, créanme... podrían ser los "perros falderos" de la reina. La risa que siguió a estas palabras hizo que Lugh cerrara los ojos, luchando por mantener la compostura. El insulto, especialmente hiriente para un hombre lobo, amenazaba con quebrar su autocontrol. Sin embargo, Patrick, sin importarle el peligro en el que se encontraba, pero consciente de que ellos no podían hacer nada, decidió llevar su provocación un paso más allá: —Dijeron que estaban al

Free reading for new users
Scan code to download app
Facebookexpand_more
  • author-avatar
    Writer
  • chap_listContents
  • likeADD