El mismo día
Paris
Gizem
Dicen que en la guerra y en el amor todo es válido, como tal si estás envuelta en una dispuesta, lo normal es tener los ojos abiertos para evitar ser emboscada o no perder la batalla, ante todo deberías adelantar los pasos y ser la primera en atacar o en su defecto encontrar el punto débil de tu enemigo para ganar. Lo malo es subestimarlo, también pensar que tendrá un ápice de escrúpulos, creer que se conformará con fastidiarte, porque no lo hará, más bien busca acabarte.
En lo particular, me di contra la pared cuando me encontré con Claudia en la oficina de Ilse, pues su mirada maliciosa, su sonrisa descarada eran un anuncio a los gritos del motivo de su reunión. No había que ser genio para leer lo que sucedía entre ellas, más que todo conociendo a la perra de
