Punto de vista de Alan.
—¿Por qué estoy aquí? —ella cruza sus brazos sobre su pecho, cuestionando.
—¿No sabes? —mi ceja se levanta.
Ana exhala, mirando hacia otro lado. Su postura grita lo tensa que está, pero actúa dura y grande.
Le pedí a Zio que la trajera aquí para que finalmente podamos tener la larga conversación pendiente sobre Natalia y lo que hizo.
—Me llamaste aquí. Sigues mirándome en lugar de decirme por qué estoy aquí. ¿Cómo se supone que voy a saber lo que quieres de mí, Alpha Alan? —ella me mira y se burla.
—Cuida tu tono. No te volveré a advertir —solté, descansando en mi silla.
Ella cierra la boca. Frunce el ceño en su frente, haciéndola parecer incluso más fácil de matar para mí.
Se produce el silencio. Mis ojos observan cada movimiento suyo. Deja que sus ojos dea
