Kristen también retrocedió un paso al escuchar aquella voz femenina, la tensión s'exual entre ambos era sofocante, pues James no apartó la mirada de Kristen hasta luego de algunos segundos, cuando a la par, dirigieron sus miradas a la puerta de cristal observando a la rubia que portaba un vestido ajustado color blanco, el largo quedaba escasos centímetros por debajo de sus rodillas, aunque tenía una abertura en la parte trasera que le facilitaba caminar. Las mangas cortas le permitían observar su piel clara y esbeltos brazos, Amanda era una mujer muy bella. La asistente mantenía su mirada en los documentos que estaba por entregarle a su jefe, pero al elevar su rostro para dirigirse a James, se percató de que él no se encontraba solo. Los ojos azules de Amanda detallaron a la hija de Luci