Mi estómago se retorció y mi pecho se tensó de inmediato cuando él solo atrajo toda esta atención hacia mí en esta arena gigante. Dejé mi cámara mientras todos me miraban, Harry era el que miraba con más dureza. Mi boca se secó como los huesos, mis manos sudaban alrededor de mi apretado agarre de cámara cerca de mi estómago. El eco de la arena se volvió tan silencioso que juro que puedes escuchar mi corazón golpeando contra mi pecho. Lo miro desde mi postura en la primera fila, mis piernas se entumecen. Volví la cabeza hacia atrás y vi a todo el equipo de producción mirándome desde la cabina de sonido, mi rodilla izquierda comenzaba a temblar. —No la necesitamos aquí—. Continúa en el micrófono para que todos lo escuchen, con un nivel de frustración en su voz mientras mira a Sal ent