Esto es un claro ejemplo de cuando rezas para que la tierra te trague...
-¿Tu novio?- preguntó mi madre confundida.
-No...-
-Sí- dije yo antes de que Josh terminara.
En ese instante lo miré y si las miradas mataran ya estaría a cien metros bajo tierra. Se podía notar a kilómetros que Josh me iba a matar en cuanto mi madre se fuera.
-No entiendo...- mi madre habló.
-Te explicaré luego, ¿sí? ahora tengo que despedirme de mi... mi novio, para explicarte mejor- dije no muy convencida. Le di la vuelta a Josh hacia la puerta y lo empujé para que saliera de la casa, cerré la puerta de entrada sin dejar que Josh me replicara por nada.
-Ahora jovencita, tengo dos preguntas para ti- dijo seria y cruzada de brazos frente a mí- Primero, ¿por qué te fuiste a ver a tu padre sin consultarme? Y segundo ¿desde cuando tienes novio?-
"Dios a esta mujer sí que le gusta preguntar"
No puedo estropearlo, tengo que ser convincente y permanecer la mentira de que fui a ver a mi padre.
Lo de Josh, que no tenía porque haberlo dicho. ¿En qué me he metido? Salgo de un problema para meterme en otro. ¿Desde cuándo mi vida es tan complicada?
"Desde que te viniste a vivir aquí"
-Mamá. a ver, como te explico- tengo que sacar los dotes de mentir inexistentes dentro de mi- cuando... pues, extrañaba muchísimo a papá. Necesitaba verlo, escucharlo, abrazarlo, tenía esa necesidad entro de mi, ¿sabes? Así que pensando en que me ibas a dar largas y que todo se complicaría decidí comprar el primer vuelo para poder verlo- tengo que meter a Josh en la historia- y mi... mi novio, le pedí que me llevara al aeropuerto y que me buscara cuando regresara. Como viste eso fue lo que hizo, me recogió en el aeropuerto y me trajo de nuevo al pueblo- terminé, me quedo mirando a mi madre rogando para que me creyera ya que la veía con el ceño fruncido y los brazos cruzados.
-¿Por qué no me llamaste? o al menos avisarme que te estabas montando en un avión, fuiste muy irresponsable Stephanie. Casi me matas de la preocupación, pensaba lo peor y la policía estaba por todos lados buscándote-
Oficialmente soy la peor hija del mundo.
-Mamá, todo paso muy rápido y mi novio tenía mi celular ya que cuando salí del coche para entrar al aeropuerto lo dejé en su auto y no sé tu número nuevo de memoria aún. No pude comunicarme contigo. Perdóname, de verdad perdóname. Prometo no volver a hacer algo parecido- por favor que me crea, por favor que me crea.
-Bien, perdonada, pero estarás castigada para que en tu vida se te vuelva a ocurrir hacer algo parecido ¡Por poco me da un infarto niña! No sabes lo preocupada que estaba- dijo abrazándome.
Si esta mujer me sigue abrazando así, estaré en cama tres días. Ya me está empezando a doler bastante el cuerpo.
-Mamá, quiero descansar. El viaje ha sido largo- dije excusándome.
-Tranquila, ve y descansa-
Subí las escaleras y caminé hacia mi cuarto, espero por fin poder meterme a la ducha y relajarme un poco.
-¿Cómo se te ocurre meterme en algo así?- gritaron.
-¡Dios!- chillé yo por el susto que me había provocado Josh al gritarme, acababa de cerrar la puerta de mi habitación y él estaba parado al lado de la cama.
Parece bastante molesto.
¿Cómo entró?
-Cariño, ¿estás bien?- gritó mi madre desde la planta baja, debió haber escuchado mi grito.
-¡Sí! ¡Tranquila!- le grité- ¿se puede saber qué haces en mi habitación y como entraste?- le susurré a Josh para que mi madre no escuchara.
-¿Se puede saber por qué le dijiste a tu madre que era tu novio y por qué me sigues metiendo en tus problemas?- dijo él susurrando. Me puse nerviosa así que me senté en la cama para poder evitar mirarle y quitarme los zapatos.
-Lo siento, los nervios me atacaron. Perdón ¿sí?- le dije con la voz suave.
-No, no está bien. Ahora mismo bajas y le dices que no soy tu novio- él estaba de pie frente a mi mirándome autoritariamente.
¿Por qué se molesta tanto?
-¿Cuál es el problema? Ya no volverás a venir aquí, además si le digo que no eres mi novio sabrá que le estuve mintiendo y tomaría eso como que también le mentí sobre mi padre y no quiero eso- le dije poniéndome de pie frente a él.
"Si que es alto"
-¿Cuál es el problema?- dijo mirándome a los ojos como siempre lo hace.
-Porque no le quiero decir a mi madre- hice una pausa para aclarar mi garganta- madre, te mentí, no fui a ver a mi padre. En realidad me secuestró un vampiro maniaco que me quería matar porque si me mata, mata a mi doble. Porque verás madre soy una doppelgänger y una vampira llamada Adriana está aliada a ese vampiro y venía a torturarme todos los días. Pero no te preocupes que aquí el joven presente- lo señalé- que por cierto también es un vampiro, me rescató y mató al vampiro y según él, la vampira no volverá a hacerme daño- le sonreí de la manera más falsa y sarcástica que pude. El revoleo los ojos y me miró con fastidio.
-No vuelvas a meterme en tus mentiras- yo asentí levemente. Luego él desapareció, dejando una brisa helada, la ventana estaba abierta.
Así que entró por la ventana.
La cerré y me dispuse a darme una ducha, por fin.
(...)
Por fin estaba tranquila y relajada. Es verdad que me comí media nevera, pero no es mi culpa, llevaba 5 días sin comer bien.
Estaba en la cama escuchando música, "Can We Dance" de "The Vamps" para ser exactos. Cuando escuché que tocaron la puerta.
-¿Si?- pregunté sacándome los audífonos. La puerta se abrió y dejó ver a Leo, Sofi, Chris y Leila.
-¡STEPHANIE!- gritaron todos para salir corriendo donde yo estaba.
-¿Cómo estás?- preguntó Chris.
-¿Dónde estabas?- preguntó Sofi.
-Hola a todos. Estoy bien, estaba con mi padre- les dije poniéndome de pie.
-Pero estabas en el bosque... ¿¡Caminaste todo el bosque hasta llegar al aeropuerto!? ¿Por qué no nos dijiste nada?- dijo Leo. Cierto, estaba con ellos en el bosque.
-Um... cuando cuando estaba caminando hacia el coche de Leo y no sé um... supongo que al estar cerca de ahogarme, me dio con pensar en mi papá y pues lo extrañaba demasiado así que... pues, decidí comprar el primer vuelo para verlo y llamé a alguien para que me recogiera- madre mía lo nerviosa que me llego a poner contando esta historia- todo pasó muy rápido- les dije sonriendo nerviosa.
-Pensé que te habías enfadado. Lo siento de verdad- dijo Chris.
-Tranquilo, no lo sabías- le dije con una sonrisa. Él se acercó a mi y me abrazó.
Esto se siente un poco, incómodo.
-¿Bueno que piensan si vamos por unos helados?- preguntó Leila, al cual todos respondieron con un "sí" inmediato.
-Lo siento chicos, pero estoy castigada y creo que de por vida. Así que voy a tener que pasar-
Además, no me apetecía volver a salir de mi casa nunca.
-Podemos hablar con tu mama, es solo una salida para comer helado.
-Um, la verd...-
-¡Lucia! – fui interrumpida por Leila quien salió de mi habitación para convencer a mi madre.
Bueno no es tan tarde, después que no me aleje de ellos, creo que debe estar bien.
•P.O.V Josh•
Después de la pequeña charla que tuve en la habitación de Stephanie corrí a mi casa para estar solo y cuando llegué solo olí su olor, su olor estaba por todas partes de mi habitación.
Como si fuera poco le tuve que dejar mi habitación cuando llegamos esta mañana para que Amelia se le hiciera más fácil tratarla.
Debo admitir que huele muy bien, su sangre debe ser, sin probarla juraría que es exquisita. Tener este olor en mi habitación solo es otra prueba de lo diferentes que son Stephanie y Jeysa. Tener este olor en mi habitación no ayudaba mucho para distraerme y sacarme a Stephanie de la cabeza, no sé lo que me pasa últimamente.
Me acuesto boca arriba en mi cama cerrando los ojos y disfrutando un poco este olor en silencio.
Decirle a su madre que soy su novio. Siempre encuentra la manera de involucrarme en sus cosas.
Recuerdo que en el pasado Jeysa era todo lo contrario. No me involucraba en sus cosas, solo me decía lo necesario para manipularme. Ella me quito todo lo que tenía, me lo arrebató. Para luego dejarme tirado, como un objeto que no tiene más uso. Solo fui su marioneta, manipulado por ella, cegado por el amor que le tenía.
Sin embargo Stephanie siempre que volteo está ahí. Ha encontrado la manera de meterse en mi cabeza de una manera distinta a la que lo hizo Jeysa.
Necesito irme de aquí. Ya no tolero su olor. Abrí la puerta de la habitación y fui a buscar a Jazmín. La cual estaba en el sofá de la sala viendo una película.
-Ya que fue tu grandiosa idea la que llevo a mí a habitación ese desagradable olor, tú vas a quitarlo. Así que muévete y elimina ese olor de mi habitación- le digo serio.
-¡Venga ya! Si te encanta- dijo ella con una sonrisa divertida.
-Solo... hazlo- dije para luego largarme.
(...)
Ya era de noche y terminé en el parque sentado en un columpio por alguna razón. Definitivamente si en mis tiempos hubieran existido, me hubiera divertido. Hacemucho viento esta nochey en una ráfaga de viento, pude apreciar su olor, el mismo olor de mi habitación. Subí la cabeza como si estuviera viendo las estrellas y así poder oler mejor, provenía del puesto de helados.
Ella estaba con sus amigos.
¿Pero y esta niña no aprende? ¿Piensa que puedo estar vigilándola todo el día? ¿Cómo es que puede salir después de todo lo que paso? Bueno al menos no está sola. Pero había alguien innecesario en el grupo. El tal Chris estaba muy pegado a Stephanie, más de lo que debería y le acababa de coger la mano.
¿Le acaba de coger la maldita mano?
Pude notar desde la distancia la incomodidad que ocasionó ese movimiento en Stephanie y aprovechó la oportunidad de que una chica le estaba enseñando algo en el teléfono para zafarse del agarre.
Eso me dio más tranquilidad.
¿Por qué me dio gusto que ella se sintiera incómoda cerca de él o que se zafara de su agarre?
¿Debo quedarme cerca hasta que llegue a su casa?
Mejor no, prefiero irme. Stephanie se puede defender solita de los idiotas y está acompañada, no creo que se atrevan a actuar con cuatro personas más presentes.