Mi vampiro malvado

Episodio 15

Abrí los ojos sintiéndome un poco mejor que los últimos días y me encuentro con que no estoy en la silla de inferno. Estoy en una cama, en una habitación diferente.

Me senté en la cama y observé la habitación mejor. La habitación era amplia y oscura, eran tonos oscuros: n***o, vino oscuro y las mesas eran de caoba. La cama era grande con sábanas de seda negra. Había una puerta cerca de la cama que supongo sería el baño ya que había puerta un poco más alejada en la pared de alfrente.

Quizás la puerta de la pared de alfrente es el baño y la otra es salida.

Tengo que salir de aquí

Con el dolor en el cuerpo me levanté de golpe de la cama y me arrepentí al segundo por ello ya que mis pies no me permitieron mantenerme de pie y caí al suelo. En ese instante escucho la puerta de la pared de alfrente abrirse y veo aparecer a una mujer y mi corazón comienza a latir rápidamente. Ella al verme abrió sus ojos alarmada y en un instante que ni siquiera vi ya la tenía a mi lado.

Es vampiro

-Oh querida, ¿estás bien?- me dijotomándome del brazo para poder levantarme, y sentarme en la cama.

-Sí- logré decir-Gracias- la mujer tiene el pelo rubio, ojos verdes claros y su tez es blanca. Es hermosa, pero ¿quién es?¿qué quiere de mi? ¿está con Alexander?

-¿Cómo te sientes? ¿Te sientes mejor? ¿Te duele algo? ¿Te sientes mareada? ¿Tienes hambre?- me preguntó de golpe y súper rápido...

-Um- ¿está preocupada?

-Oh, lo siento, debí presentarme primero. Soy Amelia, la madre de Josh, Jazmin, Joshua y Jack- me dijo con una sonrisa.

Mi corazón ya no palpita asustado y un suspiro de alivo dejaba mis labios

Josh me había encontrado.

Puedo sentir como mis ojos se cristalizan advirtiendo que en cualquier momento puedo comenzar a llorar.

-Un placer, mi nombre es Stephanie- logré decir con un nudo en la garganta y la sonrisa más honesta que pude dar nunca.

Mi vista se dirigió a mis muñecas, tenía unas marcas horribles, debe ser por las a******s.

Si así estan mis muñecas no quiero saber como estarán mis pies.

Amelia me miró con ternura y pasó una mano por mi cabello.

-Tendrás que tener hambre ¿verdad?- la verdad es que sí, me moría de hambre.

-Un poco- le contesté, no quería parecer mal educada.

Es la madre de Josh.

-Tranquila, he preparado algo muy rico para la cena que te gustará, mientras tanto cámbiate de ropa- dijo mientras me daba una bolsa que estaba al lado de ella en la cama- Jazmin te prestó un poco de ropa-

-No tenía que molestrase, en serio- Dios mio que pena.

-Tranquila, lo hacemos con mucho gusto. Anda ve, cuando termines baja al comedor, ¿de acuerdo?-

-De acuerdo, muchísimas gracias de verdad- le dije muy sincera, ella me sonrió como respuesta y luego desapareció por la puerta.

"Sí, creo que toda la familia es vampiro"

Fui hacia el baño y me miré en el espejo y deseé no haberlo hecho.

Estaba horrible y tenía unas ojera gigantes, mis ojos estaban rojos, mi pelo parecía un nido de pájaros, mi ropa estaba rota, gastada y sucia. Me veía horrible, daba miedo. Me lavé la cara y luego abrí la bolsa que Amelia me dio.

Amelia se ve que es buena persona. Es muy amable, igual que Jazmin y lo contrario de Josh, aunque jamás he conocido a sus otros dos hermanos.

Mi madre debe estar como loca buscándome, debe estar desesperda.

¿Cómo le explico mi desaparición? No le puedo decir la verdad...

"Solo tienes que decirle: madre me había secuestrado un vampiro psicópata que me quería matar, ya que si me mata, mata a mi doble porque soy una doppelganger y una vampira llamada Adriana me torturaba todos los días hasta desmayarme"

Definitivamente no.

Tengo que inventarme algo elocuente.

Abrí la bolsa y encontré unos shorts, una camisa blanca suelta, unos vans blancos, un cepillo para dientes y uno para cepillar mi cabello.

Me vestí y usé lo necesario y nuevamente me miré en el espejo.

"Ya no te ves tan mal"

Obedeciendo a Amelia, salí del cuarto para dirigirme a al comedor, pero al salir estaba en un pasillo enorme y no tengo ni idea donde estoy o donde esta el comedor.

¿Cómo llego?

Empiezo a vagar por el pasillo siguiendo la pared derecha. Dicen que si quieres salir de un laberinto sigas la pared derecha y tarde o temprano encontrarás salida.

La casa era muy luminosa. Sus paredes eran blancas, sus decoraciones modernas y el suelo lo cubría una alfombra crema. Por lo que puedo ver es una casa grande, no me imagino una casa así en el pueblo. Lo que me lleva a pensar que esta casa no está en el pueblo, quizás esté un poco más alejada.

Luego de caminar y parecer metiche me encontré por fin una escalera para ir a la primera planta. Cuando miro hacia abajo del todo veo a Josh al final de la escalera apoyando su espalda en el barandal de la escalera cruzado de brazos con aire relajado. Vestía unos jeans y una camisa negra que se pegaba a su torso y a sus musculos, su pelo levemente despeinado, sus ojos mirando a la nada.

-Sé que soy hermoso, pero podrías darte prisa en bajar- dijo sin mirarme, no me había dado cuenta que me había detenido en la escalera para verlo. Bajé las escaleras tapando con mi pleo mis mejillas para que no viera como me ardía la cara.

Me acerqué a él y me miró detenidamente desde mi cabello hasta mis pies.

-¿Cómo estás?- me miraba directo a los ojos como siempre.

-Estoy mucho mejor... gracias- quería preguntarle como terminé aquí, quiero saber la historia. Debo conocer la historia de como me rescataron, pero no la sé- ¿puedo hacerte una pre... pregunta?-

"Aprende a hablar"

-Depende- dijo comenzando a caminar.

-¿Cómo terminé aquí? digo, ¿por qué ya no estoy allí? quiero decir...-

-Te rescaté y te traje aquí para que Amelia tratara tus heridas, es buena en eso- dijo seco entrando a lo que parecía la cocina.

La promesa que me hizo en el sueño. Josh cumplió su promesa.

-¡Stephanie!- gritó Jazmin al verme. Soltó lo que tenía en la mano que eran unos platos, corrió y me abrazó.

Okay esto es incómodo, me quedé en shock ante este acto pero le correspondí con una sonrisa- me alegro que estés bien- me dijo separándose de mi.

-Gracias- la familia de Josh me parece encantadora.

(...)

Estaba sentada en la mesa con toda la familia de Josh inclusive acababa de llegar su padre, que por cierto se veía muy joven y guapo. El tenía el pelo n***o, los ojos azules y tez blanca, como todos. Estaba sentada al lado de Jazmin y a mi otro lado estaba su hermano que creo que era Jack y frente a mi estaba Josh.

-Es un placer conocerte al fin señorita Stephanie- dijo el padre de Josh- mi nombre es Andrew-

-Mucho gusto-

-Espero que la comida sea de tu agrado querida- dijo Amelia.

-Sí, muchas gracias. Está deliciosa- y no mentía, está exquisita. Lo que me tenía en incógnita era cómo me habían encontrado... digo como supieron donde estaba...- disculpe, pero puedo... ¿puedo preguntarle algo?- pregunto asustada, tal vez no sea el momento para hablar de eso.

Jack rió.

-Creo que eso debes preguntárselo a Josh- me dijo. ¿sabe que iba a preguntar?- lo siento, es que me entra curiosidad por saber lo que piensas y no puedo evitar...-

-¡Jack! ¿¡Qué te he dicho sobre eso!?- dijo Amelia fuerte y seria.

-Lo siento, no lo puedo evitar- dijo con una sonrisa.

-Jack puede leer las mentes, Stephanie- me dijo Joshua, hablando por primera vez en toda la cena.

-¿Qué tal si te llevo a tu casa? tu madre debe de estar preocupada- me dijo Josh parándose de golpe de la mesa, parecía fastidiado.

-Claro, gracias por la comida estuvo deliciosa...- les dije parándome de mi asiento- Jazmin tu ropa...-

-Tranquila, te la puedes quedar, además de que te queda bien- me dijo con una sonrisa.

Amelia vino hacia mi y se despidió diciéndome "puedes venir cuando quieras" y Jazmin se despidió con un beso en la mejilla. Jack y Joshua hicieron un gesto con la mano en forma de adiós y Andrew vino cortésmente donde mi para despedirse y disculparse por su hijo. Son una familia muy amable... creo que Josh es adoptado.

Salimos por la puerta de entrada y Josh me señaló su auto para que entrara. Me senté en el asiento de el copiloto y decidí hablar con Josh por el camino para aclarar algunas dudas.

-¿Cómo supiste donde estaba?- le pregunté cuando encendió el auto.

-Larga y fastidiosa historia- me dijo sin aparatar la mirada.

-Si mi hipótesis no falla tu casa está alejada del pueblo- le dije convencida y pude escuchar un suspiro de su parte.

-Después de que me metiera en tus sueños y no obtener nada útil a Jazmin se le ocurrió hablar con los últimos que estuvieron contigo para saber donde estabas el día de la desaparición. Joshua tiene el don de transformarse, así que él se transformó en perro para poder rastrearte por tu olor desde el último lugar en el que estuviste hasta donde te habían llevado. Jack también ayudó.

Dios mío, no les agradecí apropiadamente por salvarme.

-¿Qué paso con...-

-¿Alexander? Lo maté. Adriana huyó, pero creo que no te traerá problemas por ahora- que alivio, es como si me quitaran toneladas de peso de encima.

-Gracias, en serio gracias- dije nerviosa, el me miró de reojo y asintió levemente.

(...)

Ya habíamos llegado a casa. El resto del camino fue en silencio, Josh no era muy conversativo que digamos y yo estuve pensando qué decirle a mi madre y a los chicos sobre mi desaparición que sonara lógico, pero no tuve éxito. No tengo ni idea de qué decirle.

Así que aquí estaba yo frente a la puerta pensando que le diría a mi madre. Josh estaba a mi lado, le había rogado antes de salir del coche para que me acompañara y no me dejara sola con mi madre, quien sabe lo que haría.

Abrí la puerta y no piso bien el suelo de la casa cuando oí a mi madre...

-¿STEPHANIE, ERES TÚ?- dijo ella con un sartén en la mano corriendo hacia la puerta, cuando me vió soltó el sartén y sus ojos no podían estar más abiertos. Corrió hacia mi y me abrazó con tal fuerza que casi me caigo y mi cuerpo aún lastimado lo sintio muyyy bien- ¡¡DIOS!! ¡¡GRACIAS DIOS!! ¿Sabes lo preocupada que estaba? Estaba muerta de miedo que te hubiera pasado algo- me dijo entre lágrimas, se separó de mi y me dijo...- ¿¡¿SE PUEDE SABER DÓNDE ESTABAS STEPHANIE MILLER?!?- gritó enojada.

Te extrañé tanto mamá. Tuve tanto miedo de no volverte a ver.

-Madre tranquilízate- le dije tratando de ganar tiempo para pensar que le iba a decir, en esas ella miró a Josh y me mira rápidamente.

-¿¡¿QUIÉN ES ÉL?!? ¿¡¿DÓNDE ESTABAS STEPHANIE?!?- bonita primera impresión se llevó Josh de mi madre, el cual oí que se reía levemente cuando mi madre me estaba gritando. Con esa risa detrás de mi oreja no puedo concentrarme en decir algo lógico.

-¡Stephanie contéstame!- piensa- es la última vez que te lo pregunto-

-Fui a ver a papá- solté desesperada.

-¿¡¿Y QUIÉN ES ÉL?!?- los nervios me mataban.

-¡ES MI NOVIO!- oh no... yo no dije eso...