Capítulo 8

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  Gina Hsiao entendió lo que significa el destino. En el accidente automovilístico de hace seis años, Eason Lu resultó gravemente herido por salvarla. Seis años después, ella se había convertido en su médica de cabecera.   Bueno, ¿no dejé también la música y decidí estudiar medicina por él? ¿No era esta una oportunidad perfecta para que ella cumpliera su sueño curándolo?   No creo que me acepte como su médica.   Gina fue a la sala VIP después de saber que él estaba allí. En este momento, Eason se había cambiado de ropa. En realidad, era encantador, y su ropa negra informal era realmente fascinante.   Gina frunció el ceño con fuerza. Después de un largo rato, abrió la boca y dijo:   —Sr. Lu, este año seré la responsable de su revisión médica en el hospital.   Sin esperar a que Eason Lu hablara, agregó rápidamente:   —Si no confía en mí o si prefiere que le atienda otro médico, también puede decírmelo.   Eason la miró, y sus ojos fríos le pusieron el corazón a mil. Un segundo, dos segundos…   En este momento, no sabía en qué estaba pensando el hombre, y la frialdad de sus ojos se estaba volviendo cada vez más intensa.   —¿Cuándo vas a empezar? —dijo Eason apartando la mirada—. Tengo prisa.   Eason estaba ocupado con su trabajo todos los días. Si no fuera por Mike Lu, que lo había estado bombardeando con llamadas, no estaría perdiendo su tiempo aquí.   —Ah, vale —dijo Gina rápidamente al recobrar el sentido—. Podemos empezar ahora mismo.   De hecho, Gina quería saber cómo era su estado físico más que nadie. Dado que se trataba de una revisión médica de seguimiento, cuanto más detallado fuera, mejor. De esta manera, podía examinarlo en detalle.   —¿Ha comido algo hoy? —preguntó Gina—. Para hacerle algunas pruebas quirúrgicas es necesario que tenga el estómago vacío. ¿Ha tomado algún medicamento en las últimas 24 horas?   Al escuchar esta pregunta, Eason pareció detenerse por un momento, como si hubiera algo que no quisiera decirle. Gina dijo rápidamente:   —Por favor, no me oculte nada. De lo contrario, podría afectar al resultado de la revisión médica. De ser así, tanto usted como yo estaremos en problemas.   —Tengo el estómago vacío. Anoche tomé pastillas para dormir —dijo Eason.   Esto hizo que el corazón de Gina se encogiera de repente.   ¿Pastillas para dormir? ¿Estaba tomando pastillas para dormir?   —¿Algún problema? —preguntó Eason.   Insinuaba que si había un problema, no tenía que continuar hoy.   —No —negó Gina con la cabeza rápidamente—. No tiene importancia. Empecemos. Primero te haré una pequeña revisión.   Cogió el estetoscopio y se sonrojó sin motivo. Ni se atrevió a mirarlo a los ojos.   —Voy a empezar —murmuró.   Eason no respondió, y Gina Hsiao puso la mano en su pecho con el estetoscopio. Probablemente era la distancia más corta entre Gina y los latidos de su corazón.   Sin embargo, sintió como si el corazón estuviera a punto de salírsele del pecho. Él estaba tranquilo, nada extraño. Los latidos de su corazón eran muy uniformes, sin ninguna fluctuación. Si la apariencia podía engañar a la gente, esta era la reacción más real.   Después de seis años, ella ni siquiera le haría palpitar el corazón. Era como un extraño. Para ser exactos, ella era una extraña que odiaba.   ¿No estás satisfecha con este resultado? ¿Por qué estás triste?   —Todo es bueno.   Gina Hsiao detuvo rápidamente sus pensamientos dispersos, sacó el estetoscopio y luego dijo:   —Gracias por lo del otro día. Si no fuera gracias a ti, Star Press ya no existiría.   Eason Lu explicó vagamente:   —Si realmente estás agradecida, deberías agradecérselo a Lily. Quería minimizar el problema y no tener ningún conflicto con esos medios inmorales. No quiero que tenga un dilema.   No perdía oportunidad para alardear de su romance.   Gina Hsiao tenía muchas ganas de darse una bofetada en la cara. ¿Por qué tomó la iniciativa de decirle esto? ¡No debería habérselo dicho!   Después de eso, Gina llevó a Eason a hacer varias pruebas. Él la trató como a una médica y no estaba para nada incómodo. Al contrario, el corazón de Gina era el que latía cada vez más y más rápido, y no lo podía controlar.   Quizás ella se sintió atraída por su arrogancia desde el principio, y luego comenzó a perseguirlo como una loca. No sabía muy bien de dónde venía su valentía al principio, pero ahora ni siquiera se atrevía a mirarlo.   Ya estaban por la mitad de la revisión, y Eason Lu fue muy cooperativo. Gina Hsiao lo llevó a hacer el electrocardiograma. Gina Hsiao dijo antes de la prueba:   —Sr. Lu, ¿puede quitarse la camisa? Será más fácil.   Pero justo en este momento sonó su móvil y Eason salió a contestar. Luego volvió y dijo con prisas:   —Tengo cosas que hacer en la empresa. Me tengo que ir.   Después de decir eso, Eason Lu se dio la vuelta y salió. Gina Hsiao fue detrás de él y le dijo:   —El electrocardiograma es muy importante. Son solo unos minutos, no es nada.   —¿No escuchaste mi corazón desde cerca hace un momento? —dijo bromeando.   ¿Cómo puede comparar un estetoscopio con un electrocardiograma?   —Lo siento, tengo mucha prisa.   Después de decir eso, Eason Lu se volvió a dar la vuelta. Gina Hsiao le preguntó rápidamente:   —¿Cuándo estará libre? Tendrá los resultados esta tarde. Tengo que informarte sobre tu condición física.   —Me pondré en contacto contigo cuando tenga tiempo.   Después, Eason Lu se alejó, sacó su móvil, marcó otro número y se fue corriendo mientras hablaba.   Gina Hsiao respiró profundamente. Justo en ese momento, se sentía como si se estuviera enfrentando a un gran enemigo. Ahora su respiración ya era suave.   Gina Hsiao, me decepcionas. Puedes tratar con calma a cualquier paciente que tenga problemas. Pero cuando estás con él, tu corazón entra en pánico.   Los resultados de la prueba de Eason Lu estaban listos por la tarde. Desde un punto de vista profesional, no era muy positivo. El accidente automovilístico de hace seis años había provocado graves daños en su cuerpo, y no se había recuperado de muchos de ellos.   Al ver esto, un dolor le recorrió todo el cuerpo. Luego pensó en algo, guardó los resultados y fue corriendo a la oficina del director Gao.   —Director Gao, quería preguntarle si tiene el historial médico original del accidente automovilístico de Eason Lu de hace seis años. Quiero echarle un vistazo.   —El historial médico del presidente Lu debió haberlo transferido aquí el director Lu —dijo el director Gao—. Puedes ir directamente a la sala de historiales médicos y cogerlo.   —De acuerdo, gracias.   Gina no tardó ni un minuto. Fue inmediatamente a la sala donde estaban los historiales médicos para buscar el de Eason Lu. Cuando vio la descripción de su lesión, sintió un dolor en el corazón, como si una rueda gigante se lo aplastara.   En este momento se dio cuenta de lo grave que había sido. Había pasado por un infierno. Era un milagro que estuviera vivo.   Eason, ¿por qué fuiste tan estúpido hace seis años? Pudiste haberlo evitado.   Al pensar en eso, a Gina le dolía el corazón como si se lo hubieran rajado con un cuchillo. Sentía que no podía respirar. En ese momento, una enfermera que pasaba por allí la llamó:   —Doctora Hsiao, ya es hora de irse.   Gina Hsiao respondió rápidamente. Cuando vio su rostro, la enfermera se sorprendió y le preguntó:   —Dra. Hsiao, ¿por qué llora?
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