Capítulo 10
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Aunque todos sabían que Yanchuan tenía una ex esposa, nadie sabía de quién se trataba; pues, él nunca la había llevado a una ocasión formal. Incluso, a pesar de la discusión que hubo en internet, las personas solo llegaron a conocer su nombre.
Por su parte, cuando vio que Wanrou estaba al lado de Yanchuan, Nan se rio entre dientes y, pensó para sí misma: "¡Guau! ¿Consiguió el puesto tan pronto?".
Al notar las expresiones en el rostro de su hermana, Jin le dio una ligeras palmaditas en el brazo y, le dijo cariñosamente: "No tengas miedo. Estoy aquí".
Tras sentir el apoyo incondicional de su hermano, una gran sonrisa apareció en el rostro de Nan y, le dijo con firmeza: "Yo no soy quien debería tener miedo".
A decir verdad, Nan ya no tenía ningún lazo con esa familia y no tenía nada que temer; después de todo, ella podría ser invencible si quisiera.
Mientras tanto, con un aura totalmente impecable, Jin se acercó firmemente a Yanchuan y, sin haber ninguna diferencia entre ellos, el hombre le dijo cordialmente: "Sr. Fu, he oído hablar mucho de usted".
"Muchas gracias, señor Su. Qué bueno verlo", tras aquellas palabras de Yanchuan, los dos hombres estrecharon cordialmente sus manos.
Aunque, no podía negarse que, la mirada de Yanchuan estaba fija en la mujer que acompañaba a Su Jin, la que tenía una hermosa y radiante sonrisa.
A decir verdad, se veía tan hermosa que Yanchuan no podía apartar su mirada de ella; inclusive, con ese vestido hecho a la medida, su piel blanca se veía impecable que parecía que se hubiese transformado en otra persona.
En realidad, Yanchuan se quedó mirándola con sentimientos encontrados en el fondo de su corazón; pues, aunque se veía tremendamente hermosa frente a él, también había una sensación extraña y peligrosa en su mirada.
No obstante, al verla de pie junto a Jin, Yanchuan se preguntó si el día que desapareció del hospital fue en busca de ese hombre y, es más, no dejaba de preguntarse: "¿Qué tipo de relación tenía con Su Jin?".
En ese momento, su estado de ánimo era realmente extraño, su mirada estaba llena de ira y, ni siquiera él mismo podía explicar por qué cambió tan drásticamente.
Cuando Wanrou vio que Yanchuan tenía la mirada fija en Nan, ella apretó los dientes en secreto y, preguntó inquietamente: "Su Nan, ¿por qué estás aquí? ¿Este no es un lugar a donde puedes venir?".
A decir verdad, con esa pregunta, estaba claro que Wanrou quería recordarle a Nan su humilde identidad y, de alguna manera, quería humillarla frente al hombre.
Por su parte, tras escuchar ello, Yanchuan frunció profundamente el ceño para evitar que la mujer siguiera hablando; sin embargo, antes de que pudiera notarlo, Jin le preguntó fríamente: "¿Puedo saber a qué familia pertenece esta mujer?".
Después de aquel pequeño interrogatorio, Wanrou se quedó totalmente atónita y, utilizando a su acompañante como excusa, se explicó rápidamente: "Señor, tal vez no sabe que Su Nan se acaba de divorciar de Fu Yanchuan".
A decir verdad, Wanrou estaba segura que Nan tenía una aventura con ese hombre, así que no dudó en exponer rápidamente su identidad; pues, de alguna forma, ella pensaba que nadie podía enamorarse de Nan si sabían que era una mujer divorciada.
Sin embargo, sin prestarle ninguna importancia a las palabras de la mujer, Jin respondió con una actitud completamente indiferente: "Bueno, ¿y quién dijo que no puede venir porque está divorciada? ¿Acaso no vino también el sr. Fu?".
Al no saber que más decir, Wanrou se apartó torpemente el cabello de la oreja y, miró cautelosamente a Yanchuan en busca de ayuda; sin embargo, él no mostró ninguna intención de ayudarla.
Por su parte, Nan bajó ligeramente la cabeza y, sonriendo sarcásticamente, le dijo: "Señorita Qiao, ¿no veo por qué necesito informarle con quién salgo o no? De hecho, creo que se preocupa demasiado por mí, ¿no es así?".
Después de decirle ello, Nan no quiso involucrarse más con esas dos personas frente a ella, pues no quería otro escándalo.
Además, aunque el escándalo de Yanchuan y Wanrou había sido reprimido, eso ya se había difundido ampliamente en internet; así que, Nan no quería dar motivos para que volvieran a hablar de un matrimonio que ya se había terminado.
De hecho, fue por ese motivo que Nan ni siquiera miró fijamente a Yanchuan y, solo se centró en ver a la inmensa multitud a su alrededor.
Mientras tanto, mirando a Wanrou con total frialdad, Jin dijo de manera burlona: "Parece que el estilo de todo el banquete se ha vuelto menos elegante debido a la apariencia de la señorita Qiao. De hecho, me parece que el sr. Fu necesita mejorar su gusto por elegir acompañantes femeninas".
Por su parte, como no quería perder más su valioso tiempo hablando con esas dos simples personas, Jin tiró cuidadosamente de Nan y, se dirigieron rápidamente a otro lado de la recepción.
Mientras tanto, después de ser ridiculizada por una persona con un estatus tan alto, Wanrou de repente se sintió avergonzada y frunció los labios lastimosamente; luego, con un tono triste y berrinchudo, exclamó: "Yanchuan..."
Sin embargo, Yanchuan no estaba de humor para seguir las niñerías de esa mujer; así que, mirando la espalda de su ex esposa y su acompañante, se preguntó para sí mismo: "Pero, ¿qué es lo que le pasa? ¿Cuánto tiempo ha pasado desde que nos divorciamos? Definitivamente a esa mujer no le importa nada; incluso, pretende que no me vio y se arrojó a los brazos de otra persona".
Justo cuando estaba absorto en sus pensamientos, algunas personas se acercaron respetuosamente a saludarlo; así que, no dudó en dejar de lado a Wanrou y, se fue a saludar a los otros invitados.
...
De pie, frente a la piscina, Nan estaba serenamente bebiendo una copa de vino tinto y, de hecho, no solo parecía que estaba observando la tranquilidad del agua; sino que también, estaba disfrutando de la brillantez de la luna reflejada en ella.
Por su parte, muy molesta con ella, Wanrou no entendía como una mujer divorciada de una familia adinerada, podía entrar en un banquete de tan alto nivel.
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