La noche transcurre entre risas, música lenta y miradas coquetas de Cristopher. Hace mucho no me sentía tan bien cenando con alguien, había olvidado por completo esta sensación. — Vaya desde adolescente todo un casa nova —Bromeó y niega. —Era un chiquillo inmaduro en ese entonces, luego madure, pero el compromiso y los noviazgos no llamaban mi atención así que prefería mantener relaciones sin ataduras y eso para mis padres no era lo correcto. —Yo digo que le tienes miedo a los compromisos. —Tomo un sorbo de mi copa. —Le temo al interés de las mujeres, la mayoría de las mujeres que se me acercaban solo buscaban mi dinero o la atención de los medios, algunas no eran realmente lo que esperaba. —¿Y qué esperas en una mujer? —Pregunto curiosa. —Ya no espero nada —Susurra con una sonrisa.