Amid- seria genial que viviéramos juntos, tú y yo, di que sí. -Bonita eso sería genial- le responde y yo me molesto, la niña rubia empieza a jugar carritos con Amid y yo se que debo de hacer algo para que no se lo lleve lejos de mi, no podía permitir que el también me dejara. -Amid vamos a la piscina- le digo con una sonrisa y salgo corriendo sabiendo que él me sigue y dejaría a la rubia tonta sola. Llego a casa en la tarde, tengo el cabello mojado aun por todo el tiempo que pasamos en la piscina, aunque la rubia se nos unió la pasamos bien, mi padre me espera en su oficina así que camino de manera rápida, amo a mi padre con todo mi corazón, entro a la oficina sin tocar ya que mi padre me lo permite, el está sentado detrás de su gran escritorio y mama está a su lado, corro a los brazos