Catriel. Separo la ropa que debo lavar, es mucho lo que debo lavar, Benjamin cada día llega del trabajo, se baña y se cambia, yo le pedí si podía cambiarse porque las primeras veces juntos no lo hacía, entonces entendí que Welim no le lavaba la ropa, mandaba al lavado general, pero a mí no me gusta eso, entonces le tengo todo acomodadito así no se preocupa, le lavo todo bien fregado, y con Tahiel con nosotros es aun más cantidad, porque debo cambiarlo a cada necesidad hace, no puedo dejarlo con el popo en su cola o con el pipi, debo cambiarlo a cada momento. —¿Ya estas lista Catriel?. —Si, ya junté todo. —Andando. —llevo el canasto con el jabón de ropa, cepillo para la ropa, y las cosas para bañarnos y bañar a Tahiel, vamos a aprovechar el momento—. Uuuhhh hijo, como suena tu pancita.