CAPÍTULO DIECINUEVE
Kate no esperaba que la Dra. Henrietta Yates contestara su llamada de Skype de inmediato. Kate había trabajado estrechamente con Yates más de veinte veces a lo largo de su carrera, y sabía que era una de las psicólogas más prominentes en el campo del desarrollo y conducta inicial infantil. Si la frazada encerraba un mayor significado que lo que Kate era capaz de descifrar, Yates sería capaz de ayudar.
Kate hizo una llamada a la oficina de la Dra.Yates, y tras varias idas y venidas de la recepcionista, fue posible arreglar un improvisado cara a cara vía el portátil de DeMarco. En el tiempo que pasó, ella tomó una foto del fragmento rasgado de frazada y se lo envió por correo electrónico a Yates. DeMarco aprovechó la oportunidad para hacer una solicitud urgente al depar
