Stacy tenía muchas ganas de preguntarle por qué era tan frío e indiferente pero, ya que estaba exhausta y no tenía fuerzas para discutir con él, simplemente le dijo, haciendo un puchero: "No es necesario. ¡Tomaré un taxi!". Ella pensó que Chris le daría una muestra de agradecimiento por toda la ayuda que le había brindado durante esa noche, pero estaba muy equivocada, pues ¡Chris estaba lleno de sorpresas! Entonces, sin decir una palabra, Chris subió al coche y cerró de un solo golpe la puerta. El auto arrancó y en un instante, Stacy quedó sola en la calle. Por un largo tiempo, Stacy se quedó inmóvil y apretó los puños sin poder calmarse. Se sentía utilizada, como un trozo de papel que se utiliza para limpiar alguna mancha de suciedad. ¡Maldito sea ese bastardo! ... Mary y