—¿Cómo ha sobrevivido estos años de abstención?
—¿Por Dios Sergio vas a empezar? Yo no estoy para tus juegos, si cada vez que nos vemos vas a empezar con la misma cantaleta me lo vas avisando...
—Cálmese suegra, no mal intérprete mis intensiones, solo me preocupo por usted, por su salud...
—¿Qué carajo tiene que ver mi salud, con tu empeño, hazme el favor y córtalo de una buena vez... —Dice notablemente molesta.
—Suegra, déjeme hablar... Sí, es cierto no se equivoca al pensar en cual es mi intención, pero no lo hago por mí, lo hago por usted...
—No seas ridículo Sergio, no necesito eso ni nada de ti...
—¿Me va a dejar terminar?...
—!Termina de una buena vez! —Dijo casi gritando.
—Yo sé que usted lo necesita, una vez me dijo que por más que quería controlarse no podía hacerlo y por
