La acerqué más hacia mí, continuaba soltando lágrimas y la abracé fuertemente y ella igual a mí, le di un suave y largo beso, después me separé un poco sentándome en un banquito la atraje hacia a mí y la puse entre mis piernas y empecé a acariciarle sus nalgas y a darnos más besos. Metí mis manos por la liga de short que tenía puesto, para sentir la tersa piel de sus turgentes nalgas, para premiarla puse los dedos medios de cada mano directamente sobre su anillo y presioné de manera circular buscando dilatarlo un poco. Esto a ella le encanta y empieza a tragarme la boca literalmente y a respirar fuerte y rápidamente por la nariz, eso la pone como una moto y en su acelerado desespero empieza a sacar mi sexo desaforadamente. Luego de soltar el botón y bajar el cierre del bermuda, meter la