A las 4 estaba entrando en mi departamento, todo estaba como lo recordaba, dejé el maletín en la sala y fui directo a la cocina, tenía hambre ya que no me apeteció comer en el avión, me preparé una bala fría que me comí con agua y me acosté a dormir hasta el día siguiente. Al día siguiente miércoles, llegué muy temprano a la oficina luego de saludar a algunos empleados entré en mi despacho para encontrarme a Cony ya sentada trabajando. —No sabía que había llegado tan tarde —dije divertido. —¡Jefe! Jajaja no vale, yo estoy llegando muy temprano ahora porque voy en la noche al gym con Rosita. —¿Y ella porque no ha llegado aún? —Pregunto insinuando. —Porque aún no es su hora de entrada y antes de que digas algo no tenemos nada, la chica está aún tierna o tiene poca experiencia, o al meno