—Me ha dicho mi mamá que al parecer se acercan más problemas —dice Cami sacándome de concentración. No la sentí llegar, ni la vi salir a la terraza. Sabiendo que Gise me está viendo no me importó nada y tomé a Cami entre mis brazos y le estampé un beso suculento y me aferré a una de sus nalgas. Ella se puso muy rígida con el beso, pero cuando me aferré con fuerza a su nalga se derritió. —Uff... ¿Sergio a que se debió eso? —pregunta sorprendida relamiéndose los labios. —A que esta noche aquí va arder Troya. Quiero que empecemos el año los tres juntos. —¿De verdad quieres ese Ménage àTrois? —preguntó acelerada de repente. —Sí. —¿Vero sabe? —No aún no. lo acabo de decidir. —Bueno a mi me gusta la idea aunque, no lo creas lo he pensado mucho desde que estuvimos los tres juntos la prime