Luego de visitar la casa de Bob y conocer su historia, tomamos un tour hacia Somerset Falls, un sitio paradisíaco done hay varias piscinas naturales y varias cascadas de agua dulce. Luego de una hora y media de carretera llegamos a las cascadas y pudimos disfrutar de un medio día relajante. Después de las 2 de la tarde con mucha hambre en vez de regresar a Kingston decidí ir a Boston Beach directamente, queda mucho más cerca desde donde estábamos y allí íbamos disfrutar de lo mejor de la gastronomía jamaiquina y de la sorpresa que tenía preparado al grupo. Al ver que no vamos a regresar a tiempo a Kingston llamé al capitán Oswaldo y le encomendé que fuera a un sitio allí mismo en Kingston y nos consiguiera una cantidad grosera de porros específicos. Y luego moviera el barco a Port Mancini