Narra Lauren
La voz del subastador aún resonaba en mis oídos cuando me puse el negligé y salí del escenario. Temblé de sorpresa e incredulidad. ¿Fue real? ¿Alguien realmente me compró por un millón de dolares?
La mujer de la que instintivamente había desconfiado se acercó a mí. Ella no sonreía.
—Ven Te llevaré a tu comprador. Sin esperar mi respuesta, comenzó a alejarse.A todas las demás chicas se les había permitido regresar al vestidor, pero yo... me estaban solicitando de inmediato. Respirar normalmente, ahora era un lujo perdido.
—¿Dónde vamos?—finalmente encontré mi voz lo suficiente como para preguntar mientras corría para seguir sus pasos largos, casi enojados. Por qué estaba enojada conmigo estaba más allá de mí.
Miró hacia atrás con una sonrisa amarga.
—Tu comprador te qui
