POV: Jesús Al cabo de una hora estaba de vuelta al trabajo. Sabiendo que debía tener cuidado para que mi esposa no sospechara que me había acostado con su amiga, no toqué el tema de buscarle un novio a nuestra vecina. Cualquier interés por mi parte ya fuera a favor o en contra de hacer de celestino, haría despertar sus alertas y me sería más difícil, repetir la experiencia, pero sabiendo que debía avisar a Fabiola que Marbella me había pedido ayuda para conseguirle pareja, esperé a que volviera y aprovechando que mi mujer se estaba duchando para contárselo. Esa morena al verme entrar en el salón solo creyó que mi presencia se debía a mi interés por ella y saltando a mis brazos, me besó mientras frotaba mi sexo con el suyo intentando animarlo. Durante unos segundos mis manos recorrieron