Narrado por Linderton
—¿Aun no han encontrado a la chica? —pregunto mientras veo a uno de los encargados de este club.
—Estamos en eso señor Linderton, por favor tenga paciencia —me dice el encargado.
—Ya he tenido demasiada paciencia, esa chica lo mas probable es que se fuera.
—Una de nuestras empleadas la esta buscando, solo espere un momento y averiguaremos que fue lo que sucedió.
—Ya espero lo suficiente, y honestamente ya perdi el interes, transfierame el dinero devuelta a mi cuenta, me voy.
—¿Esta seguro señor Linderton?
—Si, no voy a quedarme aquí mas tiempo.
—De acuerdo, espero que no piense mal de nosotros por esta situacion.
—No se preocupe, si una chica se arrepintio a ultimo momento, eso no es culpa suya ni del club, quizas venga despues.
—Bien, lo esperaremos señor Linderton.
Despues de decir esto, me voy y dejo al encargado solo, y en el camino no puedo evitar pensar en la chica que me desprecio.
No de ser por mi, ella hubiera caido en las manos de ese viejo verde que le gustaban las niñas jovenes, gaste una suma mucho mas grande de la que usualmente gastaria por una sola mujer, y ella en vez de agradecer mi gesto de amabilidad como deberia, se va sin decir nada.
El enojo que siento hacia esa chica sigue aumentando, pero despues pienso que no vale la pena enojarse con una desconocida a al cual ni le conosco el nombre.
Salgo a la recepcion del club y le telefoneo a mi chofer personal para que me venga a buscar, tenia planeado pasar la noche en el club, pero por culpa de esa chica mis planes cambiaron.
—Ahora que lo pienso… Preston sigue dentro —murmuro mientras pienso en Preston.
Le habia dicho a los encargados que le enviaran un par de chicas a Preston para que pudiera divertirse esta noche, esas chicas eran mujeres profesionales y “expertas” en el arte de “complacer” a los hombres, por lo que estaba seguro que Preston disfrutaria tanto como yo esta noche.
Por culpa de esa chica desconocida, mi noche se arruino, pero no queria arruinar la de Preston, por lo que no le digo nada y ni tampoco le aviso que me ire para que pueda “disfrutar” su noche con las chicas del club.
—Espero que ese bastardo agradesca lo buen amigo que soy —murmuro, mientras espero que mi chofer llegue para llevarme a casa.
Narrado por Teresa
Mientras ese hombre desconocido, tenia su lengua en mi zona intima, estaba descubriendo un monton de nuevas sensaciones que no conocia.
Ese hombre… la forma en que hacia las cosas era mucho mejor que yo.
Soy una chica joven en la flor de su juventud, por lo que obviamente me habia “autocomplacido” a mi misma antes, pero ni usando todos mis dedos al mismo tiempo podia darme tantas sensaciones o placer como el que ese hombre me estaba dando con su lengua y con sus dedos en estos momentos.
Mis gemidos se hacen cada vez mas grandes y seguidos, pero mientras disfruto de la sensacion, el hombre desconocido… se detiene.
—¿Q-qué haces? ¿P-por que p-paras? —le digo a duras penas, ya que no podia formular palabras de forma muy bien.
No puedo evitar enojarme un poco con él, estaba en el climax y de repente se detuvo, eso me molesto.
El hombre desconocido no me responde, en vez de eso me sujeta y me voltea de una forma algo brusca, ahora estoy acostado boca abajo en la cama.
No entiendo lo que este hombre quiere hacer, pero solo instantes despues, empiezo a sentir su lengua otra vez… pero en esta ocasión es en mis nalgas.
—¡¿Q-que estas haciendo?! —le digo, mientras empiezo a sentir como su lengua empieza a recorrer mis nalgas en todas partes, y no solo su lengua, sino tambien sus labios.
Me estaba dando besos de un lado a otro mientras me lamia en algunas partes, eso me parecia raro, gire mi cabeza para verlo, y veo como empieza a subir, me da unos besos en mi espalda antes de bajar y empezar a besar desde mi cintura hasta mis nalgas.
—¿T-tendra un fetiche c-con el trasero? —pienso mientras recuerdo que algunos hombres le gustaba mas por atrás que por delante.
A pesar de que me sentia algo incomoda al principio, pronto empiezo a dejarme llevar y empieza a gustarme, pero una vez mas el hombre se detiene sin decir nada.
—¿O-otra vez? —me quejo mientras giro mi mirada para verlo.
Se habia detenido ya dos veces, y eso me estaba frutrando, cuando estoy llegando al climax el se detiene, y no se si eso le gusta o no, pero a mi me esta matando.
El hombre no me responde, y en su lugar veo como se quita los pantalones y todo lo que habia debajo de ellos.
Despues de quitarse todo lo que llevaba puesto, puedo ver finalmente su pene, el cual esta apuntando hacia mi, al verlo me empiezo a calentar mas.
—¿Por fin lo vas a hacer? —le pregunto, mientras me preparo en mi interior para lo que viene a continuacion.
Iba a perder mi virginidad hoy, ya me habia preparado para eso, pero aun asi, cuando el momento estaba a punto de llegar, no puedo evitar ponerme nerviosa.
El hombre no me responde, en su lugar me agarra por los pelos detrás de mi cabeza, y echa mi cara contra la almohada.
—Me gusta por atrás —me dice el hombre, quien por fin habia hablado nuevamente.
—¿P-por… a-atrás? —murmuro, mientras pienso a que se refiere con esto.
Solo tarde un instante en entender que queria decir cuando dijo que le gustaba por “atrás”… cuando pienso en esto me entra bastante miedo, y aun mas cuando me echa algo de liquido en mi parte trasera… eso confirma mis sospechas.
—¡E-espera! ¡P-por ahí no! ¡N-no estoy lista para eso! —le digo,aunque con una voz muy baja, ya que el hombre ya estaba empezado a hacer lo suyo.
Empiezo a sentirlo mientras trata de “entrar”.
Estaba preparada para perder mi virginidad… pero no estaba preparada para esto todavia.