[KEIRA]
Dane sujeta mi mía mientras que vamos caminando por la calle rumbo al restaurante que hemos elegido para almorzar el día de hoy, y mientras que la gente pasa a nuestro alrededor, yo no puedo hacer más que pensar en él y en mí. Hace un poco más de 15 días que nos conocemos, o mejor dicho que yo lo “contrate” por llamarlo de algún modo, y así de la noche a la mañana, sacudió mi mundo e hizo lo que se le dio la gana con todas las reglas que me había puesto a mí misma, pero honestamente no me importa mucho ya. Había olvidado lo que es sentirse así de bien, de que alguien te trate de la manera que lo hace Dane, o incluso de pasar una tarde de domingo de esta manera.
—Señorita— me dice mientras abre la puerta del restaurante para que pase primero y le sonrió.
—Siempre tan caballeroso
