"¡Esos malditos vampiros intentaron sacarle la sangre!" la mano de Ben apretó el vaso de cerveza tan fuerte que una rajada se formó de abajo hacia arriba en el vidrio transparente. Su oso interno gruñó y él lo presionó hacia abajo antes de que causara más daños. AUDREY'S era el único bar sobrenatural en la ciudad y estaba a unas cuantas cuadras de su hotel. Que le prohibieran la entrada apestaría.
Ben se tomó lo último de su cerveza, su mano temblaba ligeramente al regresar el vaso a la madera manchada de la barra.
"¡Lenguaje! Tenemos hadas aquí, joven." Audrey, la dueña (de mala fama) del bar hizo un movimiento giratorio con su mano y la grieta del vaso desapareció al volver a unirse, restaurándose a un estado perfecto.
Ben miró a su alrededor para ver a dos mujeres diminutas, cada una
