Frente a él estaba Alice, pero era una Alice muy diferente, jamás la había visto así, ni de cerca de ese aspecto. Ella quiso ocultar su rostro de él, pero no hubo tiempo para eso, ya Jared la observaba, miraba la figura delgada de aquella mujer que en cuestión de semanas ya no era ni la sombra de lo que un día fue. Estaba consumida, hasta el punto de parecer enferma, postrada en aquella cama, intentando cubrirse de él. Jared sintió como su pecho se oprimía al ver el aspecto tan demacrado de Alice, pasó una mano por su rostro, sin creérselo, un poco desconcertado ante lo que veía, anonadado con aquel aspecto tan preocupante que ella presentaba y esa delgadez tan notoria. Definitivamente no había sido nada sano perder todo ese peso de golpe, hasta cambiar su aspecto y parecer otra pers