Catrina Vidal Antes de alistarme para la cena con Elian, conduje hasta la pastelería Oh Cakes, era un trabajo que realmente me gustaba, disfrutaba mucho estar en aquel lugar, convivir con las personas y que siempre se despidieran de mí con una sonrisa después de entregarle sus postres. Era una de las cosas que siempre alegraba mi día. Había llamado a la señora Georgina para notificarle que necesitaba hablar con ella, me dijo que nos veríamos en la pastelería ya que estaba ahí con Crista. Aparque mi auto fuera del local. Cuando entré, vi que el lugar estaba casi lleno, me dio alegría ver que en los últimos días muchos clientes se habían vuelto frecuentes y las ventas habían subido. Mire de lejos a la señora Georgina que estaba en la cocina y Crista detrás de la caja. Cuando me vio cr