Ignacio. —Marce. —viene hacia mi sonriendo. —¿Si?. —¿Comienzo a hacer las hamburguesas?. —Uuuh buenísimo, las iba a hacer yo y con la cara que pones me dice que no me ibas a dejar. —Las hago yo. —Si, ahí llevo la carne. —Buenísimo. —hago el fuego pendiente a las nenas que siguen en el pelotero. —Eh, ni me avises. —Lu viene con un taper grande y se lava las manos parándose frente a la mesada donde comienza a aplastarlas. —No te veía, ¿Dónde estabas?. —No te hagas el que no me viste. —Ay mi gordita enojona. —de lado como esta la abrazo apretándole la nalga derecha—. Nunca podría no verte mami. —me alejo porque no me olvido donde estamos, paso por atras de ella así me lavo las manos para hacer las hamburguesas cuando le veo las nalgas, mi mano marcada en el pantalón gris claro y me