“La suerte es solo cuestión de oportunidades de preparar encuentros”
Lucius Annaeus Seneca
Rodrigo sale del estacionamiento, conduce hasta el restaurante, era evidente que no quiso contestar aquella llamada porque sería incómodo para ambos. Christa imaginaba por su rostro preocupado, que aunque debía contestar no se atrevió a hacerlo. No delante de ella.
—¿No va a contestar? —pregunta capciosamente.
—No, luego devolveré la llamada, se nos hace tarde para almorzar.
Ella asiente con una sonrisa evidentemente sarcástica. Tuvo que aguantarse las ganas y morderse la lengua para no mencionarle que podía ser su novia.
Llegaron al restaurante, él bajó, le abrió la puerta y ella descendió del vehículo. Rodrigo le ofreció su brazo y ella se enlazó a él. Entraron al restaurante, era un lugar lu
