Suficiente en el amor

Capítulo 12

　　—¿Viniste aquí sola? ¿Dónde está tu mamá?

　　Eason Lu miró a su alrededor. La niña está sola, ¿qué clase de madre irresponsable deja que una niña tan pequeña salga por ahí sola?

　　—Mi mami está muy ocupada, y yo soy una chica grande. Puedo cuidarme sola; no necesito que mamá se encargue de todo.

　　…

　　¿Significaba eso que la niña se había ocupado de su propia vida y que su madre no podía cuidarse sola?

　　En este momento, su secretaria se acercó rápidamente y le dijo:

　　—Presidente Lu, la reunión comenzará en cinco minutos.

　　Eason Lu bajó a la pequeña Rainy y le dijo:

　　—Pequeña Rainy, tengo una reunión. Dile el número de teléfono de tu mamá a la chica de recepción y llámala. ¿Te acuerdas de su número?

　　—Claro.

　　—Vale —Eason Lu sonrió con naturalidad. Sus ojos estaban repletos de amor—. Hasta mañana.

　　—Hasta mañana, jefe.

　　Eason Lu entró en el ascensor para ir al último piso y le dijo a Wei Lin:

　　—Búscale un buen mentor.

　　—¿Eh? —se sorprendió Wei Lin antes de volver en sí. Todavía estaba un poco desconcertada—. ¿Se refiere a la pequeña Rainy? ¿Habla en serio? Pensé que estaba de broma.

　　—No tengo mucho tiempo para bromear —dijo Eason Lu muy seriamente—. La producción de Lily Qiao necesita una pequeña actriz, déjala que lo intente.

　　—De acuerdo.

　　Cuando se abrió la puerta del ascensor, Eason Lu entró en la sala de conferencias. A Wei Lin le sorprendió que la pequeña hubiera tenido tanta suerte. La nueva producción de Lily Qiao necesitaba una pequeña actriz que interpretara el papel infantil de la protagonista. Las exigencias del director eran muy estrictas, y estaban planeando hacer una audición a nivel nacional. ¡No podía creer que se hubiera decidido así!

　　Al escuchar lo que le había pasado a la pequeña Rainy, Yvette se quedó completamente atónita.

　　—¿Qué le ha pasado al mundo?

　　—Madrina, ¿qué pasa? —la miró la pequeña Rainy sin entender nada—. Encontré un trabajo. ¿No estás contenta?

　　Yvette sintió que le habían cuestionado su visión de este mundo. Luego volvió en sí y le dijo:

　　—Claro que estoy feliz, pero no me puedo creer que el presidente Lu quiera contratarte.

　　—Sí, me pidió que les diera el número de mi mamá, pero no me atreví, así que les di el tuyo. Te llamarán más tarde —dijo la pequeña Rainy.

　　Esta vez, Yvette la levantó emocionada y le dijo:

　　—Pequeña Rainy, eres genial. Si acabas siendo una estrella infantil de Lu's Enterprises, tendrás un futuro brillante. He tomado una decisión, dejaré de buscar un trabajo. Si tienes éxito, seré tu agente.

　　—Vale —la pequeña Rainy entrecerró sus grandes ojos en una sonrisa—. Pero no se lo digas a mami, porfi. No le va a parecer bien.

　　—No te preocupes, este es nuestro secreto. Queda entre tú y yo, prometido.

　　Después de prometerlo con el dedo meñique, Yvette le dijo:

　　—Pequeña Rainy, no le digas al presidente Lu que me conoces.

　　—¿Por qué?

　　¿Por qué? Yvette no tuvo más remedio que cambiar de tema.

　　—Da igual, solo tienes que escucharme. Si no, afectará a tu futuro.

　　—De acuerdo, madrina.

　　*

　　Cuando Eason Lu salió de la sala de conferencias, se sintió agotado tanto física como mentalmente. Afortunadamente, había solucionado los asuntos de Shawn Xing.

　　—Jefe, estos días está muy cansado. Hagamos un descanso.

　　Eason Lu no respondió a las palabras de Wei Lin. En cambio, sacó su teléfono y vio que Lily Qiao le había enviado algunos mensajes.

　　—Sé que estás ocupado, así que no me atreví a llamarte. Debes cuidar tu salud.

　　—En un rato tengo que ir a grabar. ¿Estás libre esta tarde? ¿Vamos a comer juntos?

　　Eason Lu no respondió a estos mensajes. Cuando estaba a punto de guardar el móvil, una llamada de Gina Hsiao lo sorprendió.

　　El teléfono sonó bastante tiempo. Gina Hsiao pensó que lo más seguro es que no lo cogiera. Cuando estaba a punto de colgar, lo cogió.

　　—Hola.

　　—Siento molestarlo.

　　Gina no quería provocarlo, pero estos días, mientras leía su historial médico, estaba preocupada por él. Como médica, debía ser responsable de su paciente.

　　—Sr. Lu, ¿cuándo está libre? Hay algunos problemas serios con su condición física, así que quiero hablarlo con usted.

　　Eason Lu pareció haberlo pensado durante un rato. Luego dijo:

　　—En media hora en la plaza Wenjiang. Si llega tarde otra vez, no habrá una tercera oportunidad.

　　—De acuerdo.

　　Él ya había colgado. De hecho, Gina Hsiao estaba bastante sorprendida. Ella lo había llamado dos veces. Pensó que él la rechazaría, o que respondería con indiferencia unos días después, pero no esperaba que él le propusiera una cita con tan poca antelación, como había hecho la otra vez.

　　Sin embargo, esta vez era un poco más difícil. La plaza Wenjiang no estaba demasiado lejos del Hospital Everbright, pero había mucho tráfico. Gina colgó el teléfono y salió corriendo del hospital con el informe en los brazos.

　　Esta vez, ella llegó a tiempo, pero él no. Se sentó en el banco de piedra y esperó, sin parar de mirar la hora. Al final, casi se quedó dormida. Eason llevaba casi una hora de retraso.

　　No esperaba que le llegara un cliente tan importante cuando estaba a punto de salir. Después de hablar durante más de una hora, Eason Lu le dijo algo a Wei Lin cuando estaba haciendo un pequeño descanso.

　　—Wei Lin, ve a la plaza Wenjiang para ver si aún está allí. Si está, dile que vaya al lugar donde vivo ahora, dale la llave y pídele que me espere en casa.

　　—¿Eh? —Wei Lin estaba muy sorprendida—. ¿Que lo espere en su casa?

　　—Sí.

　　—De acuerdo.

　　Wei Lin hizo lo que le había dicho.

　　Gina Hsiao había estado esperando una hora y media. No sabía si debía seguir esperando, llamarlo o marcharse.

　　—Doctora Hsiao —dijo Wei Lin tras acercarse a ella con el coche y bajar la ventanilla—. El presidente Lu está ocupado en este momento. Por favor, súbase al coche.

　　Como ya se habían visto antes, se subió al coche. Después de subir, no se dirigieron la palabra. Wei Lin la llevó hasta el lugar donde vivía Eason Lu y le dio la llave, tal como él le había ordenado.

　　—El presidente Lu vive en el 1805. Esta es la llave.

　　—¿Qué quiere decir?

　　Gina también estaba atónita. ¿Qué estaba haciendo él?

　　—El presidente Lu no sabe cuándo volverá. Doctora Hsiao, puede esperar en su casa.

　　¿Qué?

　　—De acuerdo, gracias.

　　Gina Hsiao se quedó atónita durante un buen rato antes de coger la llave de la mano de Wei Lin. Después de que Wei Lin se fuera, Gina Hsiao volvió a mirar la llave que le había dado y tuvo sentimientos encontrados.

　　Cogió el ascensor hasta el piso donde él vivía. Cuando se dirigió a su puerta, le temblaban las manos. Ella no sabía por qué. ¿Podría ser el hogar de Eason Lu y Lily Qiao?

　　Gina Hsiao se paró durante unos segundos y luego se dio cuenta de que estaba siendo ridícula. Eason Lu se había olvidado completamente de ella y la trataba como a una completa extraña, incluso la dejaba ir a su casa para hablar sobre su enfermedad. ¿Por qué debería ella sentirse sentimental?