"Ciertamente que no, Hermano". "Pero el juramento de silencio no se aplica a esos lugares, así que no estamos rompiendo ninguna regla. ¿Está todo claro hasta ahora?" "No, en realidad... hay una cosa..." "¿Qué cosa?" "Me dices que los beneficios de la Orden en el mercado los recibe el Abad. Eso no puede ser cierto. A los pobres de Calatrava no les preocupa mantener el castillo cuando no tienen con qué poner comida en sus mesas. Deberíamos regalar lo que no necesitamos, así que el Abad haría bien en leer Isiah 55:1: "¡Ho! Todo el que tenga sed, que venga a las aguas. Y vosotros que no tenéis dinero, venid, comprad y comed. Venid, comprad vino y leche. Sin dinero y sin costo". "¡Ho! Todo el que tenga sed, que venga a las aguas. Y vosotros que no tenéis dinero, venid, comprad y comed. Ve