—¿Me amas Chloe? —Repitió Leandro, su rostro descendió como un halcón al ver a su presa, pero Chloe se negó a sucumbir a la tentación, justo en el momento en que estuvo a punta de besarla ella giro su rostro, sentía que habia sido como estar en una carrera, la adrenalina hacia correr la sangre en sus venas a una velocidad que la enviaba al mejor de los mareos Ese sentimiento era algo que conocía muy bien, cada vez que estaba cerca de él sentía que estaba bajo los efecto de la más potente de las drogas, era una adictas a sus labios, a su aroma, a todo su ser Y no quería ser rehabilitada Los labios de Leandro besaron su mejilla, despacio y tentadores, aun retenida en sus brazos sus labios dejaron un camino de besos desde su mejilla hasta su clavícula haciendo que más de un suspiro de pla